El descontento se extiende entre los vecinos de la capital a medida que reciben las notificaciones de pago de la nueva tasa de residuos del Ayuntamiento de Madrid, con cuantías que, en muchos casos, son superiores a las esperadas y no se compensan con la reducción aplicada al Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI). Ante esta situación, la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM) ha iniciado una campaña para que la ciudadanía formalice recursos de reposición contra la ordenanza.
La FRAVM había advertido al Consistorio hace un año sobre las consecuencias de aprobar una tasa que considera «injusta, poco progresiva y diseñada con errores clamorosos». La organización vecinal lamenta que el Ayuntamiento «ignoró casi todas las alegaciones» presentadas en noviembre de 2024, a pesar de haber tenido tiempo suficiente para elaborar una propuesta más equitativa.
Recursos disponibles para los vecinos
La campaña de la FRAVM busca presionar al equipo de gobierno de José Luis Martínez-Almeida para que rebaje las cuantías de la tasa y modifique la ordenanza. Para ello, su área jurídica ha puesto a disposición de los ciudadanos dos modelos de recursos de reposición que se pueden descargar en su sitio web:
- Modelo de Reducción: Para solicitar que se rebaje la cuantía de la tasa al considerarla desproporcionada.
- Modelo de Anulación: Para reclamar la exención completa del pago en los casos contemplados por la ley, como beneficiarios del Ingreso Mínimo Vital (IMV) y de la Renta Mínima de Inserción (RMI), así como viviendas en estado de ruina, solares, garajes y trasteros vinculados a viviendas.
La organización recuerda a los vecinos que el plazo para presentar el recurso es de 30 días desde la recepción de la notificación de pago. Recomiendan abonar la tasa antes de registrar el recurso en las Oficinas de Atención a la Ciudadanía (OAC) o en la web del Ayuntamiento. Para quienes ya hayan superado el plazo, la FRAVM ha elaborado un modelo específico de queja o reclamación.
Críticas a los criterios de la Tasa
La organización vecinal defiende la implantación de una tasa de residuos como herramienta para una ciudad más limpia, pero rechaza el modelo actual. Insisten en que, para que las cargas sean justas, deben introducirse criterios de renta en el cálculo, tanto para la tasa de basuras como para impuestos como el IBI, bajo el principio de «que pague más quien más tiene».
Si bien el Ayuntamiento incorporó dos de las alegaciones iniciales (la exención a perceptores del IMV y RMI) y recientemente anunció la futura inclusión del número de personas empadronadas en la vivienda como criterio (aplicable a partir del próximo año), la FRAVM critica que «resulta un absoluto despropósito» que actualmente una viuda que vive sola pague lo mismo que un hogar de tres o cuatro miembros.
En esta línea, la FRAVM no comparte la exención a las familias numerosas sin que se aplique un «elemento corrector de la renta», pues considera injusto que familias numerosas de renta alta no paguen a pesar de generar un elevado volumen de residuos.
Finalmente, la Federación duda de la precisión de los datos usados por el Ayuntamiento para calcular la Tarifa por Generación y el Coeficiente de Calidad en la Separación, y solicita implementar un sistema de pago por generación individualizado, aprobar una tasa turística finalista para financiar la gestión de residuos generados por los visitantes, y crear una mesa de seguimiento vecinal con datos transparentes por barrio.
Foto: FRAVM.
