La Junta de Gobierno ha autorizado el contrato de los servicios de mantenimiento y limpieza de las papeleras instaladas en la ciudad de Madrid, cuyo presupuesto asciende a los 38 millones de euros repartido en cinco anualidades y cuyo inicio está previsto para diciembre de 2025, según ha anunciado la vicealcaldesa y portavoz municipal, Inma Sanz.
Este contrato, tal y como recoge su memoria, es fundamental para la capital al facilitar la colaboración de la ciudadanía en el correcto mantenimiento del estado de limpieza de las calles. En la actualidad, el Ayuntamiento de Madrid cuenta con más de 91.000 papeleras competencia del Servicio de Limpieza, todas ellas dotadas de cenicero, y más 7.000 de ellas con expendedor de bolsas para la recogida de excrementos caninos.
El contrato, impulsado por el Área de Urbanismo, Medio Ambiente y Movilidad en el marco del desarrollo de la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360, engloba varios conceptos. En primer lugar, el servicio de mantenimiento, conservación y limpieza de las papeleras del modelo Cibeles. En estos momentos, hay en torno a 89.000 papeleras de este modelo en las calles de Madrid. Se encuentran ubicadas en los espacios públicos y su capacidad (40, 50, 80 o 120 litros) y ubicación se elige fundamentalmente en función de las características del entorno.
El modelo de papeleras Cibeles es propiedad en exclusiva del Ayuntamiento de Madrid por un plazo de 25 años, a contar desde febrero de 2009. Cuenta con dos variedades: grises, para las ubicadas en vías y espacios públicos, y verdes para las instaladas en parques y jardines. El modelo de 60 litros puede llevar incorporado un expendedor de bolsas biodegradables para la recogida de los excrementos caninos.
Como novedad, el segundo servicio incluido en el contrato es el mantenimiento, conservación y limpieza del nuevo modelo de papeleras de zonas verdes de gran capacidad. El diseño de esta papelera será realizado por el adjudicatario del contrato a partir de los requisitos marcados por el Ayuntamiento de Madrid: será un modelo exclusivo para la capital, con una capacidad mínima de 1.200 litros, con una boca de al menos 25 centímetros y un diseño que evite la acumulación de agua por lluvia y permita que tanto su vaciado como su limpieza se ejecute de manera sencilla y rápida. Deberán contar con cenicero, con la posibilidad de instalar un expendedor de bolsas y dispositivos táctiles de identificación para invidentes.
Se instalarán un mínimo de 1.000 unidades de estas papeleras y el proceso comenzará en tres meses desde la obtención de la homologación. Se colocarán de forma prioritaria en las entradas a parques, zonas de concentración de personas como auditorios, puntos habituales de consumo de comidas y bebidas y en las proximidades de áreas infantiles, deportivas, de mayores y caninas.
Compactadoras solares: dispositivo antivandalismo y sensores de llenado
El adjudicatario de este contrato también deberá asumir la instalación, mantenimiento, limpieza y conservación de 1.300 papeleras compactadoras solares. Se ubicarán preferentemente en zonas amplias y de alta afluencia de personas como salidas de centros comerciales o de metro. Deberán tener una capacidad mínima de 120 litros y una altura máxima de 1,400 metros para garantizar que el tráfico y los peatones tengan una visibilidad clara de las calles. Será obligatorio que estén dotadas de un sistema de compactación integrado alimentado por energía solar capaz de operar de forma totalmente autónoma. Dotadas con cenicero, dispositivo antivandalismo y pedal con sistema de apertura controlada, estas papeleras suministrarán, a través de sensores, información en remoto sobre posibles incidencias y su nivel de llenado.
El contrato autorizado hoy en Junta de Gobierno también incluye la reposición de aquellas papeleras que queden fuera de uso y no puedan ser reparadas, el servicio de reposición de bolsas en las papeleras con dispensador y la gestión, así como el mantenimiento y conservación (incluyendo la instalación y su posterior retirada) de 830 aros con bolsa para suplementar la capacidad de recogida de las papeleras que se encuentran en las zonas de celebración de eventos. Estos últimos se utilizan con motivo de eventos de especial relevancia (se celebran en 134 días al año de media) y son aros circulares que pueden acoplarse a las farolas de forma que quedan sujetos a ellas durante el transcurso del acto para el que han sido instalados a modo de papelera y, posteriormente, sean retirados.