El Hospital Universitario Gregorio Marañón de la Comunidad de Madrid es el primer complejo sanitario público de España, y uno de los pocos de Europa, que ofrece una terapia de última generación para pacientes con Parkinson. Está basada en la estimulación cerebral profunda adaptativa, una técnica que ya se utiliza desde hace tres décadas, pero utilizando una tecnología de vanguardia que supone un avance significativo frente a esta patología.
Se trata de un dispositivo similar a un marcapasos cardíaco, que utiliza un neuroestimulador implantado quirúrgicamente para transmitir señales eléctricas a partes específicas del cerebro afectadas. Su ventaja es que permite a los médicos personalizar el tratamiento en función de las necesidades del paciente, brindando una estimulación específica para cada caso, en función de su condición y momento vital.
Este sistema mejora el control de los síntomas ya que se ajusta automáticamente, lo que minimiza la necesidad de que los enfermos y los facultativos interactúen con el dispositivo para ajustarlo manualmente. De esta manera, se mejora no sólo la vida de quienes lo padecen y las personas de su entorno, sino también la eficiencia clínica en su abordaje.
El Parkinson afecta a más de 1,2 millones de personas solo en Europa, y más de 10 millones en todo el mundo. Perjudica la movilidad, el habla, la concentración, el sueño, la independencia y la capacidad general de los afectados en sus rutinas de trabajo, familia y vida social.
La Unidad de Trastornos del Movimiento del Hospital público Universitario Gregorio Marañón fue designada en 2015 Centro de Referencia Nacional (CSUR) en adultos y niños para patologías raras con estos síntomas. Está integrada por miembros del Servicio de Neurología, Neuropediatría, Neurocirugía, Neurorradiología, Neurofisiología, Psiquiatría y Psicología, Rehabilitación, Nutrición, entre otros. Su misión es la atención integral de enfermos con trastornos del movimiento, incluyendo la cirugía funcional mediante estimulación cerebral profunda.
Este CSUR atiende un promedio de 600 pacientes al año. Además, desde 2021 pertenece a la prestigiosa Red Europea de Referencia para Enfermedades Neurológicas Raras (ERN-RND), tras haber obtenido la máxima valoración por la Agencia Evaluadora.