La Agencia de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid (ASEM 112) ha emitido un comunicado indicando que, ante la gran cantidad de llamadas recibidas, la avispa asiática no está presente en la región madrileña. Aunque su veneno no es mortal, a no ser que uno sea alérgico a la avispa común, sí que es más potente y rápido, por lo que hay que tener especial cuidado con ella.
«No ha llegado a Madrid, pero su parecido con otras especies autóctonas hace que algunos ciudadanos tengan dudas y llamen al 112», exponen desde la ASEM 112. Por ello, informan de que la avispa asiática (vespa velutina) tiene la cabeza negra, cara amarillo-rojiza, tórax muy oscuro, una línea fina amarilla en abdomen, con la zona extrema de las patas de color amarillo. Mide hasta 3,5 centímetros, vive en grandes colonias y es más agresiva que otras si te acercas al nido.
Por su lado, la avispa que sí vive en la Comunidad de Madrid y con la que se confunde es el avispón europeo (vespa crabro): es autóctona con un tamaño similar y sus patas oscuras, pero sin extremos amarillos. Su abdomen es más amarillo.
Los madrileños la confunden también la avispa asiática con la avispa mamut (megascolia maculata): es también autóctona. Es enorme, pero muy tranquila. Mide 5 centímetros, lo que la convierte en la más grande de Europa). Tiene 4 manchas amarillas en el abdomen.
Finalmente, existe la vespula germánica, autóctona. Es la más común que tenemos en Madrid. Mide 1,5 centímetros, por lo que es mucho más pequeña que las demás.
Desde la Agencia de Seguridad y Emergencias de la Comunidad de Madrid recuerdan que t las avispas son peligrosas si eres alérgico o te pican muchas a la vez. Esto es más probable con la asiática, ya que sus nidos tienen muchos individuos.