El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha presidido hoy el acto de entrega de las Medallas de Honor y de Madrid con las que el Ayuntamiento rinde homenaje cada año a personas e instituciones en reconocimiento a su trayectoria y compromiso con la ciudad y que se entregan cada 15 de mayo, coincidiendo con la festividad de San Isidro, patrón de la capital.
Almeida ha definido al santo como un “modelo de persona sencilla y trabajadora, figura del tesón silencioso y emblema de las virtudes de esta ciudad”. En este sentido, ha señalado que el Madrid de hoy es muy distinto al Madrid en el que vivió San Isidro, gracias a una “transformación verdaderamente asombrosa” que se ha producido gracias a “la constancia de un pueblo” que “ni ignora las dificultades, ni exagera sus capacidades” y que “tras ponderar ambas, sigue encontrando razones para dejarse la piel por un futuro mejor de unidad y de libertad”.
Los madrileños conmemoran cada 15 de mayo la figura de San Isidro “con la misma alegría, las mismas ganas de vivir, las mismas ganas de comerse el mundo y el mismo espíritu castizo” de aquella época y todo, “bajo la misma pradera y la misma luz radiante del cielo azul de Madrid”, ha celebrado un Almeida orgulloso del “alma de Madrid y su voluntad de servicio al resto de España”.
Acompañado por la vicealcaldesa, Begoña Villacís, los miembros del Gobierno municipal y representantes de los grupos municipales, el alcalde ha recordado, asimismo, que las Fiestas de San Isidro de este año suponen el “broche final” al Año Santo que se ha celebrado desde mayo del pasado año con motivo del 400 aniversario de su canonización.
Por su parte, la vicealcaldesa ha felicitado a todos los madrileños en el “día del patrón de la Villa”, una villa que es “ese lugar en el que cantar a gritos por la unión de los madrileños en una nación y por una autonomía llena de pichis”, lo que, según la vicealcaldesa, “no supone una reivindicación, sino una invitación a no tomarnos demasiado en serio nuestros orígenes y a disfrutar de Madrid”. Una ciudad, ha añadido Villacís, “que es la ciudad de todos, nativos y adoptados, precisamente, porque no pertenece a nadie” y en la que “seguimos hoy, construyendo el mejor Madrid, celebrando sus fiestas populares”.
Medallas de Honor
En la festividad de San Isidro, el Ayuntamiento ha distinguido con la Medalla de Honor a título póstumo a Melchor Rodríguez García en reconocimiento a su labor humanitaria durante la Guerra Civil que le valió el sobrenombre de ‘el ángel rojo’.
Almeida ha destacado la figura de quien, desde su cargo como delegado especial de Prisiones, “con su arrojo y poniendo en juego su propia vida, puso fin a las matanzas de Paracuellos y salvó la vida de sus propios enemigos”, dejando para la historia de Madrid y de España un “ejemplo de dignidad, humanidad y valentía que perdurará siempre en nuestros corazones”. Melchor Rodríguez fue, además, alcalde de Madrid en 1939, durante los últimos días de la guerra. Por ese motivo, el alcalde ha anunciado hoy que un retrato de Melchor Rodríguez se incorporará a la galería de alcaldes que existe en la Casa de la Villa. Su bisnieto, Rubén Buren, ha sido el encargado de recoger la Medalla de Honor.
De Ana Rosa Quintana, el alcalde ha subrayado su “carácter contundente y personalidad carismática”. Periodista, presentadora de televisión y empresaria, Ana Rosa es una de las profesionales más conocida y respetada en el panorama audiovisual español y “atesora una carrera profesional tan extensa como exitosa”, ha dicho Almeida. Cuenta con una larga trayectoria plagada de reconocimientos como varios TP de Oro, un Micrófono de Oro e, incluso, un Premio Ondas en 2011, galardones a los que ahora se suma la Medalla de Honor del Ayuntamiento de Madrid, la ciudad que la vio nacer, que ha recibido de manos del alcalde.
Nombrar ‘La bola de cristal’, canciones como Bailando o Mi novio es un zombi, programas como ‘Cine de Barrio’ y el reality show ‘Alaska y Mario’ hacen pensar en Olvido Gara, Alaska. Referente en los 80, Almeida la ha descrito como la “musa de la movida madrileña”. Asimismo, el alcalde ha destacado su “prolífica y brillante carrera de cantante, actriz, compositora, presentadora de televisión, empresaria, productora y escritora”. Por todo ello, la ciudad de Madrid, a la que llegó con tan solo diez años, la ha hecho meritoria de la Medalla de Honor.
Medallas de Madrid
Almeida y Villacís han puesto en valor, asimismo, la trayectoria de una docena de personas y entidades que han destacado por sus méritos, así como por la defensa de los valores cívicos o haber prestado servicios a la capital, lo que les ha convertido en meritorias de la Medalla de Madrid.
Del dramaturgo, ensayista y director de teatro Juan Mayorga, Almeida ha destacado su trayectoria en la escena teatral, “con obras que han sido representadas en todo el mundo”. Doctorado en Filosofía por la UNED, ha sido profesor, ha escrito ensayos y actualmente asume la Dirección Artística del Teatro de la Abadía. Además, ha sido galardonado con diferentes reconocimientos, entre los que destaca el Premio Princesa de Asturias de las Letras. Por todo ello, el Ayuntamiento ha querido reconocer a este madrileño de Chamberí con la Medalla de Madrid, que ha recibido de manos del alcalde.
El pintor Augusto Ferrer-Dalmau ha sido, asimismo, reconocido con la Medalla de Madrid por su labor de renovación en el género de la pintura de batallas. Barcelonés de nacimiento, los cuadros de Dalmau, según Begoña Villacís, “son fotografías con una documentación histórica y técnica inigualable”, una obra donde el detalle y la veracidad son protagonistas indiscutibles, presentes siempre en sus paisajes, uniformes y armas. Motivo, entre otros, por el que el Ayuntamiento de Madrid le reconoce su labor con la medalla que le ha entregado la vicealcaldesa de Madrid.
El diestro Julián López Escobar, conocido como El Juli, era un adolescente cuando tomó la alternativa en Nimes, Francia. Apasionado de los toros desde niño, ingresó en la Escuela de Tauromaquia de Madrid con tan solo nueve años. Considerado una de las principales figuras de la tauromaquia de inicios del siglo XXI, “El Juli atesora en su toreo un arte con hondura significativa y única”, tal como ha señalado Almeida. Más de 1.800 corridas de toros, 4.000 toros y más de 3.000 orejas se encuentran en el haber de este ‘maestro’, motivo por el que el Ayuntamiento de la capital le ha otorgado la Medalla de Madrid que le ha entregado el alcalde.
“Hablar de Blanca del Rey es hablar del Corral de la Morería, del epicentro del flamenco en la capital”, ha dicho Almeida de la bailaora y coreógrafa cordobesa que, además, ha llevado el arte del flamenco por todo el mundo. Caracterizada por su ‘Soleá del Mantón’ a la que da “alma propia”, Blanca de Rey ha sido también merecedora de premios como el Nacional de Flamenco o la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, entre otros reconocimientos, a los que ahora suma la Medalla de Madrid que le ha entregado el alcalde.
La vicealcaldesa ha sido la encargada de entregar la Medalla de Madrid a Pedro Masaveu Compostizo, miembro del Patronato de la Fundación Masaveu, que también ha sido reconocida hoy por su labor en diversos ámbitos como la creación artística y la conservación del patrimonio y, de manera especial, ha explicado Villacís, “por su labor de divulgación de la cultura y el arte y su contribución a la formación e investigación científica.” La Fundación Masaveu encargó a Jaume Plensa la pieza Julia, la cabeza femenina de doce metros de altura que se encuentra expuesta en la plaza de Colón.
Corazones, rayas, lunares, estrellas y color, mucho color, forman la carta de presentación de Ágatha Ruiz de la Prada. Esta diseñadora madrileña ha conseguido crear un “universo personal y único propio” que va más allá de la moda, “en el que late una opción preferencial por la alegría”, ha dicho Almeida y que abarca también el arte, la decoración o la escenografía. Por todo ello, el alcalde le ha entregado hoy la Medalla de Madrid en reconocimiento a su “brillante” trayectoria.
De Antonio Pau, Almeida ha destacado su carrera como jurista, escritor y traductor, “tan asombrosamente dilatada que parece más propia de la ficción que de la estricta realidad”. Además de su amplia formación en el campo del Derecho y la música, Antonio Pau ha sido merecedor de diferentes reconocimientos, entre los que destaca el Premio de Ensayo y Humanidades Ortega y Gasset o la Encomienda de la Orden de Alfonso X el Sabio, entre otros muchos, a los que ahora se une la Medalla de Madrid que ha recogido de manos del alcalde.
Las Lideresas de Villaverde, “unas auténticas luchadoras de barrio”, en palabras de Villacís, son mujeres de más de 65 años que se unieron en 2014 con la intención de promover la igualdad de género en el ámbito local, así como para dar visibilidad al papel de las mujeres mayores en su distrito. Desde entonces, además de desarrollar diferentes iniciativas y proyectos, han conseguido poner en marcha un programa de radio en Onda Merlín Comunitaria (OMC) con la finalidad de familiarizar a las personas mayores con la comunicación social. Por todo ello, Villacís les ha hecho entrega hoy de la Medalla de Madrid en reconocimiento a su trabajo.
Almeida ha sido el encargado de hacer entrega de la Medalla de Madrid a la Archicofradía Primaria de la Real e Ilustre Esclavitud de Nuestro Padre Jesús Nazareno de Medinaceli, que el Ayuntamiento le ha otorgado por su labor de custodia del ‘Señor de Madrid’, a quien la ciudad tiene gran devoción y “al que es tradicional pedir tres deseos de los que siempre concede uno”, ha señalado el alcalde. Su vicehermano mayor, Miguel Ángel Izquierdo, y el superior de los Hermanos Capuchinos, Benjamín Echevarría, han sido los encargados de recoger este reconocimiento de la ciudad de Madrid.
Madrid cuenta desde hace 45 años con Plena Inclusión, la Federación de organizaciones de personas con discapacidad intelectual o del desarrollo. Durante esta etapa, Plena Inclusión ha sido la encargada de impulsar diferentes acciones en pro de la mejora de la calidad de vida de toda la ciudadanía y, en concreto, de las personas con discapacidad y, como ha explicado Villacís, día a día “sigue ganado peso en su papel de agente social”. Por este motivo, el Ayuntamiento de la capital les reconoce su labor con la Medalla de Madrid que la vicealcaldesa ha entregado a su presidente, Tomás Sancho.
De abrir en 1923 una tienda en la calle Gran Vía de Madrid, convirtiéndose en la primera librería moderna de España, Casa del Libro es en la actualidad una prestigiosa cadena con establecimientos en diferentes ciudades españolas, por lo que la vicealcaldesa les ha felicitado “por ese centenario dando voz a todo el mundo”. Referente en el sector, también ofrece una amplia oferta de servicios entre los que destacan pedidos personalizados y la venta a organismos y bibliotecas. Por todo ello y por convertirse en punto de reunión de autores, editores y lectores, ha sido galardonada hoy con la Medalla de Madrid que han recogido su director general, Javier Arrevola, junto a la directora de Marketing y Producto, Blanca Asuero, y la directora de Retail, Patricia Pérez, de manos de Villacís.
Finalmente, Villacís ha hecho entrega, asimismo, de la Medalla de Madrid a Clemente González Soler, presidente del grupo industrial y tecnológico ALIBÉRICO “a quien todos los madrileños debemos un aplauso por su eficacia y rapidez”. Este ingeniero aeronáutico gallego fue el promotor de organizar la Cumbre del Clima COP25, así como de la construcción, en tan solo 29 horas, del hospital de IFEMA durante la primera oleada de la pandemia de la COVID-19, motivos, entre otros, que le han hecho merecedor del reconocimiento por parte del Ayuntamiento.
Fotos: Ayuntamiento de Madrid.
1 comment
Pero si ana rosa es una plagiado de tomo y lomo y algo turbio hay con Villarejo and company. Sobre alaska Pues quien la vio y quien la ve. En resumen, vergonzoso.