El Pleno del Ayuntamiento de Madrid ha aprobado esta tarde de martes, 31 de enero, la propuesta del Grupo Municipal de Vox para dar a una calle el nombre del Papa Benedicto XVI, recientemente fallecido.
La iniciativa, presentada por el concejal Fernando Martínez Vidal y que reclamaba al Ayuntamiento de Madrid que se dedique un espacio público «relevante» al Papa Benedicto XVI, ha contado con el apoyo de PP, PSOE, Ciudadanos y Vox. Por su lado Más Madrid se ha abstenido, mientras que el Grupo Mixto ha votado en contra.
Vidal ha señalado que el cristianismo es «la religión más practicada en el mundo» y «España es un país mayoritariamente católico, y ha contribuido a expandir el cristianismo en todo el mundo». «Su figura se engrandeció a la hora de renunciar al Pontificado. Será recordado como una figura de transición», ha subrayado, recordando que Benedicto XVI «estuvo tres veces en España, una de ellas en Madrid por la Jornada Mundial de la Juventud».
El papa emérito Benedicto XVI, alemán de nombre secular Joseph Aloisius Ratzinger, murió en la mañana de sábado, 31 de diciembre, a los 95 años de edad en el monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano, donde residía tras su histórica renuncia al papado en el 2013.
Así lo había confirmado la Santa Sede en un comunicado oficial traducido a seis idiomas, en el que se expone que «Con pesar doy a conocer que el Papa emérito Benedicto XVI ha fallecido a las 9:34 horas en el Monasterio Mater Ecclesiae del Vaticano». Sus restos serán depositados en la misma fosa de la Cripta del Vaticano en la que estuvo Juan Pablo II y que dejó tras ser beatificado (pasando a la planta principal de la Basílica) y la capilla ardiente se instalará a partir del 2 de enero, mientras que el funeral será el día 5 de enero, presidido por el papa Francisco.
Curiosamente, ha sido más tiempo papa emérito que papa. Su pontificado, el 265º de la historia de la Iglesia Católica, no superó los 8 años en total, mientras que han pasado 10 años desde su renuncia. Fue el primer papa en más de 700 años en renunciar y fue un auténtico papa viajero, con 24 expediciones, la primera a su tierra Colonia (Alemania).
Benedicto vino la primera vez en 2006 a Valencia y posteriormente visitó Barcelona y Santiago de Compostela en el 2010 y por último Madrid en el 2011. Durante su visita a España, fue muy crítico con las leyes del aborto y del matrimonio homosexual, esta última de reciente aprobación en ese momento.