Cuando arrancamos nuestro vehículo no somos conscientes de los procesos mecánicos que se producen para que funcione. Uno de los elementos más importantes son las válvulas del motor; sin ellas, no se conseguiría la energía necesaria para que el motor pueda funcionar.
En las siguientes líneas vamos a analizar la función de la válvula y nos vamos a centrar en su importancia.
¿Qué son las válvulas del motor de un coche?
Las válvulas del motor son un tipo de pieza metálica que permiten que la mezcla de combustible y aire pueda acceder a las cámaras de combustión, además de salir de las mismas. Si no existiesen dichos elementos, el motor no podría funcionar. De su existencia depende que se cree la energía suficiente como para que ocurra el desplazamiento de las ruedas.
Cada válvula está compuesta por 2 partes claramente diferenciadas:
- Espiga: es la parte más larga de la válvula. También se le llama cola de la válvula o vástago.
- Cabeza: también recibe el nombre de plato o cabeza de válvula y es la parte superior.
Los materiales que se utilizan durante el proceso de fabricación son aleados debido a que deben soportar temperaturas elevadas que pueden llegar a ser de hasta 1000ºC.
¿Qué función tienen las válvulas del motor?
Estos componentes se encargan de la gestión de la mezcla de combustible aire para conseguir que esta alcance el cilindro. Una vez que se ha producido la explosión de la mezcla por la compresión del pistón, permitirán que entren los gases que resultan de la misma.
Lo más común es que estén localizadas en la tapa de los cilindros, en la culata (dependiendo del modelo de vehículo del que estemos hablando, pueden estar localizadas en otros lugares).
La cabeza de la válvula reposará en la tapa, ajustándose a la misma a la perfección y así conseguir que el cilindro se selle por completo. En cuanto al vástago, este se encontrará dentro de la guía correspondiente y facilitará el movimiento de la apertura y cierre que gestionará el árbol de levas.
Aunque a lo largo de este texto hemos podido dar a entender que todas las válvulas de admisión son iguales, no es así.
La válvula de admisión, que es por donde accede la mezcla, tendrá un mayor tamaño que la válvula de escape (que es por donde salen los gases). Esto tiene su explicación, ya que las condiciones por las que se produce la admisión y el escape son muy diferentes.
Todo esto puede complicarnos el hecho de diferenciar entre un tipo de válvula u otro. Sin embargo, tan solo nos tendremos que centrar en el tamaño de la cabeza, así como en su forma. Las válvulas de admisión cuentan con un cabeza más grande, pero también tienen una forma plana por la parte anterior. En cambio, las de escape tienen la cabeza más pequeña y la forma anterior es cónica.
Ahora ya sabes por qué las válvulas del motor son tan importantes.