El Ayuntamiento de Madrid ha concluido la reforma integral de la calle Ortega y Gasset en el ámbito comprendido entre el paseo de la Castellana y la plaza del Marqués de Salamanca. Para comprobar el resultado de la ejecución de los trabajos en los casi 700 metros que abarcan este tramo, el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida ha visitado la zona acompañado de la delegada de Obras y Equipamientos, Paloma García Romero, y del concejal de Salamanca, José Fernández.
Las actuaciones, ejecutadas por el Área que dirige García Romero con una inversión de 5,5 millones de euros, han permitido la adecuación y puesta en valor del entorno arquitectónico de una de las calles más comerciales de la capital. Para ello, se han seguido criterios similares a los de la remodelación de la calle Serrano, realizada en 2009.
Mejorar la movilidad peatonal y la calidad ambiental han sido las premisas fundamentales sobre las que ha girado la actuación en Ortega y Gasset. Así, con objeto de establecer itinerarios peatonales y espacios estanciales claramente definidos, se ha creado una plataforma peatonal pavimentada con grandes losas de granito contigua a las fachadas y se ha potenciado la doble alineación de arbolado como zona estancial. Para dar continuidad y priorizar ese itinerario peatonal, tienen especial relevancia los pasos de peatones de los cruces transversales, que han aumentado en número. Además, el proyecto también ha contado con el cumplimiento de la normativa vigente de accesibilidad, para lo que se han dispuesto baldosas podotáctiles en el itinerario.
En lo que respecta a la mejora de la calidad ambiental y el paisaje urbano, el nuevo diseño ha contemplado la plantación de nuevo arbolado permitiendo completar la doble alineación que existe en algunas aceras de la calle. La pavimentación en esta zona de doble arbolado se ha realizado con adoquín permeable para contribuir a la sostenibilidad de la gestión del agua y a la reducción de la isla de calor. Asimismo, se han dispuesto una serie de jardineras en la banda de la acera que limita con la calzada.
Alumbrado más eficiente y nuevo mobiliario urbano
Junto con lo anterior, otro de los aspectos reseñables de la remodelación es la renovación completa del alumbrado público, que redundará en la mejora de la calidad de la iluminación, que será más homogénea, y de la eficiencia energética. Para ello, la vía cuenta ahora con luminarias con tecnología ‘led’ y sistemas de regulación.
Además, el tramo reformado dispone ahora de nuevo mobiliario urbano compuesto por dos tipos de bancos. En las zonas estanciales bajo los árboles se han instalado bancos de madera con respaldo y apoyabrazos, adaptados y accesibles. Y en la zona próxima al bordillo de la acera, los bancos son de granito para, además de cumplir su función, permitir, junto a las jardineras, mejorar sensiblemente la seguridad de los bajos comerciales frente a posibles alunizajes. Asimismo, para facilitar el uso de la bicicleta, los usuarios de este tipo de transporte disponen ahora de aparcamientos en los lugares más demandados.