La Policía Municipal de Madrid ha interpuesto este fin de semana, del 11, 12 y 14 febrero, un total de 804 multas por botellón y por conducir ebrio, con 77 detenidos, y 276 a locales y terrazas por diversos incumplimientos.
Concretamente, este fin de semana se han interpuesto 705 multas por consumo de alcohol en vía pública, conocido popularmente como ‘botellón’. Además, los agentes municipales realizaron 823 controles de alcoholemia, en los que denunciaron a 99 conductores y detuvieron a otros 77 por conducir bebidos, al superar los 0,60 miligramos de alcohol por litro en aire respirado.
Por otro lado, durante el fin de semana se interpusieron 191 denuncias a locales de ocio tras inspeccionar 164 de estos establecimientos, y se denunció a 85 terrazas tras inspeccionar a un total de 158. La intervención más importante fue el desalojo de más de 300 personas de una conocida discoteca del distrito de Salamanca por superar con creces el aforo máximo permitido.
Además, agentes de la Policía Municipal de Madrid han requisado este fin de semana una decena de armas prohibidas en el marco del control de la escalada de actos de bandas juveniles de los últimos días en colaboración con la Policía Nacional. Entre las armas requisadas destacan varios machetes, encontrados escondidos en matorrales de parques de los distritos de Centro, Ciudad Lineal y Moncloa-Aravaca, alcantarillas o zonas comunes de algunas comunidades de vecinos, como un cuarto de contadores. También se han requisado durante los cacheos y registros realizados en zonas de ocio juvenil.
Además, se han controlado los establecimientos donde se venden estas armas, aunque muchas de ellas fueron adquiridas por Internet. Inmaculada Sanz, delegada de Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid, ha indicado que «hablamos de armas de curso legal y venta libre de las mismas». «El Ministerio está estudiando alternativa para modificar la legislación para que sea más difícil acceder a ellas. Nosotros estamos pendientes para que no se vendan a menores pero no podemos actuar ante situaciones legales de manera muy activa», ha subrayado.
En cuanto a los escondites de dichas armas, como arbustos y alcantarillas, Sanz ha expuesto que «no es algo que nos sorprenda. No es una operativa distinta a la de antes, pero nos preocupa que la edad de los pandilleros se han reducido y hay más mejores de corta edad que antes y estaremos pendientes».
Con todo ello, Sanz ha destacado que se ha vivido un fin de semana tranquilo, muy diferente al anterior, cuando murieron dos jóvenes de 15 y 25 años de edad, relacionados con la banda de los Trinitarios, y otro de 17 años resultó herido grave, al parecer a manos de sus rivales de Dominican Don’t Play (DDP). Tan solo se ha registrado una reyerta menor en el distrito madrileño de Usera, en la que un chico ha resultado herido leve, y alguna detención por drogas.