La Comunidad de Madrid ha invertido 3 millones de euros en la renovación de las Áreas de Intervencionismo Cardiaco y Vascular, así como la Unidad del dolor del Hospital Universitario de La Princesa.
El consejero de Sanidad del Gobierno regional, Enrique Ruiz Escudero, ha visitado hoy el hospital para conocer de primera mano estos trabajos, incluidos en el Plan de Renovación de Infraestructuras y Equipamiento en el que está inmerso este centro hospitalario público madrileño. El Área de Intervencionismo recientemente reformada, ubicada en la primera planta del hospital, tiene una superficie de 578 metros cuadrados que alberga cuatro salas intervencionistas, dos dedicadas a radiología intervencionista vascular y dos para intervencionismo cardiaco.
Estas salas, catalogadas como quirófanos tipo B según la normativa europea, cuentan con unas estrictas medidas de seguridad ambiental en cuanto al flujo y calidad del aire, y se encuentran refrigeradas y con presión positiva. Además, las cuatro comparten un espacio de adaptación para los pacientes en el que estos permanecen vigilados, recibiendo los cuidados oportunos por personal sanitario, antes y después de los procedimientos a los que son sometidos.
A través de la radiología intervencionista vascular se realizan procedimientos de diagnóstico y tratamiento de un amplio espectro de enfermedades mediante técnicas mínimamente invasivas, como por ejemplo ictus no hemorrágicos, aneurismas, malformaciones vasculares, así como resolución de estenosis y obstrucciones de arterias o venas.
3.500 procedimientos al año de radiología intervencionista
En el Hospital Universitario de La Princesa, de manera pionera y con más de 30 años de trayectoria en este campo, el Servicio de Radiología Intervencionista, dirigido por la doctora Alfonsi Friera, lleva a cabo unos 3.500 procedimientos anuales, suponiendo estas técnicas, en muchos casos, una alternativa para los pacientes a la cirugía tradicional que reduce riesgos y estancia hospitalaria.
La renovación de estos espacios ha contado con un presupuesto de 1,6 millones de euros y lleva aparejada la adquisición de la última tecnología, como la incorporación de un angiógrafo digital biplano. Este aparato ofrece visión anatómica del órgano a tratar en dos planos, lo que aporta precisión y permite el abordaje de los problemas neurológicos y vasculares periféricos con una menor dosis de radiación, tanto para el paciente como para el profesional que lleva a cabo el procedimiento.
Última tecnología en imagen cardiaca para intervencionismo
Por otro lado, las salas de intervencionismo cardiaco y hemodinámica, dependientes del Servicio de Cardiología, realizan unos 2.000 procedimientos al año y disponen también de la última tecnología para el diagnóstico de patologías del corazón.
Así, realizan intervencionismo coronario así como implante de marcapasos y de diferentes dispositivos percutáneos para el tratamiento de cardiopatías estructurales, con altas cotas de seguridad para el paciente. Otra de las prestaciones relevantes son los nuevos sistemas de imagen cardiaca y fisiología, con co-registro de las imágenes angiográficas que permiten visualizar de forma no invasiva tanto el interior de los vasos como estudiar detalladamente su fisiología.
También se han implementado nuevos sistemas para mostrar las imágenes de ecocardiografía y del TAC dentro de las salas, fusionadas sobre la angiografía convencional. Dos nuevos polígrafos de última generación completan el equipamiento, facilitando las presiones sanguíneas de todas las cavidades del corazón.
En este caso, la adquisición de tecnología y la renovación de espacios han supuesto una inversión de 980.412 euros. Estas actuaciones, unidas a la experiencia de este Servicio de Cardiología, liderado por el doctor Fernando Alfonso, lo convierte en referente en intervencionismo cardiaco con una producción científica muy relevante: 90 artículos científicos en diferentes revistas biomédicas internacionales con alto Factor de Impacto en el año 2020.
Especial atención al dolor de procesos oncológicos
En cuanto a la Unidad del Dolor, dirigida por la doctora Concepción Pérez, su reciente remodelación, por importe de 363.000 euros, la ha convertido en un espacio accesible y luminoso situado también en la primera planta del centro, en el que se ha buscado la funcionalidad y el confort de los pacientes. Para ello cuenta con seis sillones para administración de tratamientos y cuatro camas, además de varios locales para consulta.
Su actividad se resume en la atención de 7.500 pacientes en consulta médica y 1.000 en consulta de enfermería. Además, realiza más de 900 técnicas intervencionistas al año para mitigar todo tipo de dolor. La filosofía de la Unidad se basa en la atención centrada en el paciente, la humanización con proyectos participativos, la medicina personalizada e innovadora con los últimos tratamientos, poniendo especial foco de interés en el paciente con dolor provocado por procesos oncológicos.
La Unidad del Dolor del Hospital Universitario de La Princesa es multidisciplinar, con investigación propia, y goza de gran prestigio en la Comunidad de Madrid. Prueba de ello es que la mitad de los pacientes que atiende no pertenecen al área sanitaria asignada al hospital y han ejercido el derecho de libre elección para ser tratados en ella.
Cuatro años de grandes reformas
Las zonas visitadas por el consejero de Sanidad esta mañana constituyen un avance más en la ejecución del Plan de Renovación de Infraestructuras y Equipamiento que está acometiendo el Hospital Universitario de La Princesa en los últimos cuatro años, con una inversión global de 23,3 millones de euros.
Algunas de las actuaciones que ya se han desarrollado en el marco de este programa de reformas son la actualización de la instalación eléctrica del edificio, la creación de una nueva Unidad de Atención Ambulatoria y la remodelación integral del Área del Cáncer, dotado con un nuevo Hospital de Día para la administración de tratamientos, 16 habitaciones individuales, un nuevo Acelerador Lineal y un equipo de Braquiterapia de Alta Tasa para un abordaje diagnóstico y terapéutico del cáncer con la última tecnología.