La Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid ha notificado este miércoles, 5 de agosto, al Ministerio de Sanidad cinco nuevos brotes de COVID-19 en la región, con un total de 80 casos positivos y 75 contactos en seguimiento, ninguno de los cuales ha requerido ingreso hospitalario.
El primer brote, detectado en Madrid capital, cuenta con 17 casos positivos y otros 17 contactos en seguimiento. El brote, asociado al ámbito social, se produjo en un bar durante la celebración de un cumpleaños en el que participaron 33 personas de todas las edades. El segundo, con tres casos y ocho personas en seguimiento, está asociado al ámbito laboral; los casos positivos corresponden a tres trabajadores de una discoteca ubicada en Madrid capital que se encuentra clausurada.
El tercer brote se localiza en los municipios de Alcorcón y Leganés, afecta a cuatro personas y tiene tres contactos en seguimiento. Está asociado a los ámbitos familiar y laboral.
El cuarto brote notificado al Ministerio de Sanidad se ha producido en una institución socio-sanitaria de Pozuelo de Alarcón y cuenta con nueve casos positivos y otras nueve personas en seguimiento. Todos ellos se encuentran en situación de cuarentena y seguimiento, respectivamente.
Por su parte, el centro socio-sanitario de Pozuelo de Alarcón afectado ha reforzado las medidas de seguridad habituales, lo que incluye el aislamiento del ala afectada, habitaciones separadas y cerradas y la limitación de las visitas familiares. Además, se encuentra en constante coordinación con los profesionales de la Dirección General de Salud Pública de la Comunidad de Madrid.
Finalmente el quinto rebrote se ha producido en una institución socio-sanitaria ubicada en San Martín de la Vega, con 47 casos positivos, uno de los cuales ha fallecido. Además, seis de las 47 personas que ha dado positivo se encuentran hospitalizadas con cuadros de neumonía y deterioro por enfermedades previas.
De los 47 casos positivos, 38 corresponden a residentes y nueve a profesionales de la residencia de personas mayores. Además, se está realizando un seguimiento a 38 de sus contactos: 24 residentes y 14 empleados de esta institución, que hasta la fecha carecía de casos previos de la COVID-19.
El brote se detecta a raíz de la realización de pruebas PCR a cuatro residentes que presentaban síntomas. El estudio del resto de usuarios y trabajadores ha identificado otros 43 casos positivos, todos asintomáticos. La Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad mantiene abierta la investigación epidemiológica y se encuentra en estos momentos completando la identificación y toma de muestras de los contactos estrechos que son externos a la residencia.
Además, la Consejería de Sanidad se mantiene en constante contacto con la Consejería de Políticas Sociales, y conjuntamente están realizando distintas actuaciones para el control del brote, atención de los residentes, familiares y trabajadores. El equipo referente de Geriatría del Hospital Universitario Infanta Elena de Valdemoro está coordinado con el profesional sanitario del centro.
Entre otras actuaciones, para evitar el riesgo de contagio y mejorar la atención en la residencia, se está trasladando a residentes sin infección a otros centros socio-sanitarios. Asimismo, se realiza seguimiento de los pacientes asintomáticos que permanecen en el mismo.
Por su parte, la Dirección General de Coordinación Socio-Sanitaria está revisando el Plan de Contingencia del Centro y las medidas de prevención que se deben mantener con los residentes, tanto en este centro como en la residencia donde se trasladan.
El objetivo de la detección precoz de COVID-19 es, una vez son confirmados los casos, poder transmitirlo a los técnicos de Salud Pública de manera inmediata, para que el seguimiento y control de los contactos sea inminente, determinando las medidas oportunas de control de los contactos, evitar así la posible propagación y conseguir con ello los contagios tengan la menor incidencia posible.
La Comunidad de Madrid recuerda a los ciudadanos la importancia de la responsabilidad individual en la adopción y control de las medidas higiénico-sanitarias para evitar la propagación de los contagios; la obligatoriedad del uso de la mascarilla; la frecuente limpieza e higiene de manos, bien con agua y jabón o con gel hidroalcohólico; y la concienciación de que el coronavirus es una enfermedad que nos afecta a todos, independientemente del rango de edad.