- Una ‘cortina’ lineal de 700 metros junto a la M-40.
- También se han creado nuevos accesos y caminos, renovado la vegetación y dotado de más mobiliario.
- Un circuito recorre el parque de norte a sur y conecta con caminos secundarios que acceden a las diferentes áreas estanciales y deportivas.
El Ayuntamiento de Madrid ha finalizado las obras de remodelación del parque Alcalde Jesús Pérez Quijano, en el distrito de Vicálvaro. Durante cuatro meses y medio y con un presupuesto de medio millón de euros, el Área de Gobierno de Medio Ambiente y Movilidad ha transformado esta zona verde en un parque sostenible.
Las 5,5 hectáreas y media de superficie cuentan con paseos y caminos renovados, nuevos espacios ajardinados y más áreas caninas. También se han mejorado los sistemas de riego y drenaje para facilitar el esparcimiento de este pequeño pulmón en el barrio de Valdebernardo.
Aprovechando partes del trazado antiguo, se han diseñado itinerarios que favorecen los recorridos. Un circuito atraviesa el parque de sur a norte y en ambos extremos se han pavimentado dos pequeñas plazas a modo de rotondas que dan continuidad al recorrido. De este paseo nacen caminos secundarios que conectan con las diferentes dotaciones: áreas infantiles, caninas, deportivas o estanciales.
El nuevo diseño ha supuesto la reubicación de algunos elementos, como la fuente de agua potable que se ha trasladado unos metros, y la incorporación de más mobiliario urbano: 80 papeleras, 60 bancos, vallados, elementos de gimnasia para mayores, dotaciones para el circuito canino, cartelería, etc.
También se ha demolido la colina artificial, una zona estancial aislada que se encontraba oculta y que ahora se ha integrado en el parque como una zona verde más con diversa vegetación.
Cipreses para aislar
Para aislar al parque de los efectos negativos que genera el tráfico de la M-40, se ha realizado una plantación lineal a modo de pantalla vegetal. Esta cortina verde de 700 metros es de doble alineación. La primera fila la ocupan cipreses, un arbolado de hoja perenne y crecimiento rápido que garantiza su función de aislamiento durante todo el año.
Para la segunda, se han elegido arbustos de buen porte y desarrollo frondoso como arces rojos, tuyas orientales y azahares de China. Esta pantalla, además de proteger de la contaminación atmosférica y visual, sirve de guía y orientación a los vecinos, ya que permite identificar el perímetro del parque.
En cuanto a la jardinería, se ha respetado la configuración original y solo se ha actuado en las zonas que requerían una intervención, como en el caso del pinar. Esta zona ocupa casi la mitad de la superficie del parque y presentaba una excesiva densidad, por lo que se han se han realizado aclareos y podas que mejoran el desarrollo y consolidación del arbolado.
También se han realizado labores de arboricultura para unificar el estado de los más de dos kilómetros de setos de aligustre y se han repuesto las zonas donde había huecos, que suponen cerca de 415 metros.
En la zona más próxima a la entrada desde la calle Ladera de los Almendros, se han plantado ejemplares ornamentales como el árbol del amor, junto a plantas crasas y arbustos. Olivilla, jara blanca, salvia, rosa de siria, agracejo, tomillo o romero son algunas de las especies elegidas por su escasa necesidad de riego y su resistencia a la sequía y heladas.
Drenaje sostenible
Al igual que ha sucedido en varios de los parques que el Ayuntamiento de Madrid ha rehabilitado, las obras que se han ejecutado también han incluido la implantación de un sistema de drenaje sostenible. Su instalación proporciona suelos transitables y permeables ya que permiten la infiltración natural de las aguas pluviales evitando inundaciones. Además, facilitan la absorción de la escorrentía generada en las superficies impermeables cercanas.
Con la colocación de zanjas de drenaje en diferentes zonas de los jardines se devuelve al suelo un estado de humedad acorde al ciclo natural del agua, un elemento relevante para la vegetación de los parques urbanos. En cuanto a la red de riego, se ha revisado la instalación automática y se ha ampliado a las zonas de nuevas plantaciones como es el caso de la pantalla vegetal.
En mayo de 2018, la Junta de Gobierno aprobó el cambio de denominación de este enclave para homenajear a Jesús Pérez Quijano, alcalde de Vicálvaro cuando era municipio independiente de Madrid. Hasta ese momento era el parque Valdebernardo M-40.