La federación madrileña de IU elevará a los ministros de su organización en el gobierno su posición para que se la planteen al Ministerio de Justicia
Izquierda Unida Madrid ha manifestado su «total rechazo» al desalojo llevado a cabo en la mañana de ayer viernes del Centro Social La Ingobernable en su nueva sede okupada en la calle Alberto Bosch, en pleno Estado de Alarma por coronavirus. La organización se hace eco de las quejas de los colectivos pertenecientes a este espacio autogestionado, que denuncian que «no se atendió a sus derechos al ignorar sus alegaciones en el proceso administrativo de desahucio».
Para Carolina Cordero, coportavoz de IU Madrid, la decisión es “incomprensible, por el momento en que se produce pero sobre todo por lo que supone para las madrileñas y los madrileños perder un espacio de encuentro y construcción colectiva que tanto ha aportado al tejido social de la ciudad”.
La coportavoz de Izquierda Unida ha apuntado «la importancia de este tipo de iniciativas, que en sus años de actividad se había convertido en un punto de encuentro social y cultural, con la participación de personas y entidades de todo tipo».
Por su parte, Álvaro Aguilera, coportavoz de IU Madrid y secretario general del Partido Comunista de Madrid (PCM), ha querido “trasladar a los compañeros y compañeras del Centro Social La Ingobernable, todo el apoyo solidaridad de ambas organizaciones”.
“El gobierno no debería estar, ni en estos momentos ni en ningún momento, cerrando iniciativas ciudadanas tan necesarias e imprescindibles como este Centro Social, muy al contrario cualquier institución pública lo que debe es siempre tratar de impulsar y favorecer que haya espacios de construcción colectiva, de debate y de solidaridad mutua”, ha añadido. “Necesitamos una región de Madrid llena de centros sociales auto organizados y que contribuyan a la construcción de poder popular”.
Inciden que «no es la primera vez que el espacio vive un desahucio. El pasado mes de diciembre, el Ayuntamiento de Madrid rechazó las peticiones del colectivo de cesión de su antigua sede en la calle Gobernador y procedió al desalojo del edificio, posteriormente cedido a una entidad sionista cuyo patronato cuenta con el ex alcalde Alberto Ruíz-Gallardón como presidente».
Tras estos hechos, el 4 de marzo, el Centro Social se dispuso a retomar su actividad en el inmueble de la calle Alberto Bosch 4, vacío desde 2014. Tras su okupación, el Ministerio de Justicia activo un procedimiento para su desalojo, resuelto y publicado en el BOE el pasado día 16 «a pesar de las alegaciones presentadas por el colectivo».
La federación madrileña de Izquierda Unida ha anunciado que solicitará a los ministros de su organización, Alberto Garzón y Yolanda Díaz, que medien con el Ministerio de Justicia para que «se destinen espacios sin uso y viables a su uso como centros útiles social y culturalmente, en régimen de cesión para su autogestión por movimientos sociales y colectivos».
