- En la clausura del proyecto educativo ‘Comparte sin arriesgarte’, que transmite los beneficios de los entornos digitales y alerta de sus peligros.
- El delegado de Familias, Igualdad y Bienestar Social ha destacado la importancia de promover entornos escolares libres de ciberacoso.
- Asimismo, ha compartido la campaña del Ayuntamiento ‘El amor construye. Si destruye no es amor’, centrada en el papel que tienen las nuevas tecnologías en las relaciones.
El delegado del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social del Ayuntamiento de Madrid, Pepe Aniorte, ha participado esta mañana en la clausura de ‘Comparte sin arriesgarte’, la segunda edición del proyecto educativo impulsado por Huawei Iberia que promueve el uso seguro y responsable de las nuevas tecnologías entre los escolares.
En este contexto, ha explicado los programas que el Ayuntamiento de Madrid está desarrollando en esta materia y ha compartido con los asistentes la reciente campaña promovida por el Consistorio con el lema ‘El amor construye. Si destruye no es amor’, centrada en el papel que tienen las nuevas tecnologías en las relaciones y que persigue evitar que sean un medio de control que convierta las relaciones en tóxicas y que puedan desembocar en violencia de género.
Además, Aniorte ha manifestado su compromiso en promover entornos escolares seguros y se ha abierto a explorar iniciativas específicas contra el ciberacoso y el ciberbullying porque, según ha indicado, “el ciberacoso tiene una gran intensidad ya que permite el acoso las 24 horas del día y todo lo bueno que tienen las redes sociales, si se centran en el acoso, supone un peligro para los adolescentes”.
Evitar peligros en entornos digitales
En el acto de clausura, Aniorte ha hecho hincapié en la importancia de la colaboración público-privada, “sobre todo en temas tan relevantes como la educación de los menores”.
El proyecto ‘Comparte sin arriesgarte’ tiene por objetivo contribuir a la educación de los más jóvenes, transmitiéndoles los beneficios de las nuevas tecnologías y potenciando su formación en los entornos digitales para evitar los peligros que puede conllevar que se usen inadecuadamente. Durante el tiempo que ha durado el proyecto, el aula virtual ha formado a 18.000 escolares de entre 9 y 13 años de 81 colegios, en 45 ciudades. Además, ha contado con la participación de 7.000 padres y educadores.
Esta iniciativa nació en el año 2012 con la organización de encuentros didácticos con estudiantes de 85 colegios de España. La interacción con los jóvenes permite comprender multitud de comportamientos y hábitos de los menores en relación al uso de las nuevas tecnologías. Con esta segunda edición, se ha dado un paso más para potenciar las capacidades de los niños a favor del uso responsable de la tecnología.