El Juzgado de Primera Instancia número 52 de Madrid ha condenado a la marca alemana Vorwerk, fabricante y comercializadora del popular electrodoméstico Thermomix en España, a pagar un total de 17.914 euros como indemnización a una mujer por las quemaduras de primer grado en cara, brazos y tronco sufridas después de que la tapa de su robot de cocina se abriera subitamente y le arrojara el puré de calabacín hirviendo que estaba cocinando.
Los hechos ocurrieron en julio del 2015, en su casa de la localidad madrileña de Fuenlabrada, cuando la tapa de su Thermomix TM-31, cuya goma tenía un defect de fábrica según la sentencia judicial, estalló al alcanzar altas temperaturas.
Las aspas a gran velocidad proyectaron el puré hirviendo en todas direcciones y la onda expansiva impulsó a la víctima hacia atrás. Las quemaduras en el torax derivaron en “heridas sangrantes de profundidad intermedia que precisaron tratamiento médico y farmacológico” en la Unidad de quemados del Hospital de Getafe, lo que obligó a la mujer a estar 18 días de baja.
En un principio Vorwerke se negó a indemnizar a la víctima por las graves lesiones sufridas, ya que la marca alegaba que el accidente había tenido lugar por el «deficiente mantenimiento y el uso incorrecto del aparato» por parte de la demandante.
Además, desde Thermomix se indició en que en el libro de recetas que acompaña al aparato se indica que «con la crema de calabacín se deje pasar unos minutos para que baje la temperatura antes de abrir la tapa».
Sin embargo, y tras dos años de reclamaciones y casi otros dos años más de pleito, el Juzgado de Primera Instancia número 52 de Madrid le ha dado la razón a la mujer, indicando la sentencia que la indicación sobre la crema de calabacín se refleja en el libro actual, pero no en el que se dio a la víctima en su venta.
“Por más que la empresa afirme que todo ocurrió por una falta de mantenimiento, lo cierto es que la tapa de referencia se abrió cuando no era su momento, sorprendiendo a la actora y causando las quemaduras que constituyen las lesiones”, explica la sentencia.
“La circunstancia de que saliera salsa durante la cocción no ha sido corroborada, tajantemente, como causa” y concluye exponiendo que «la tapadera saltó espontáneamente debido a un defecto del anclaje».
Ante ello, se condena a Vorwerke a pagar un total de 17.914 euros como indemnización, además de los intereses devengados desde que la demanda fue interpuesta, la limpieza que se tuvo que hacer de toda la cocina y las costas del proceso, lo que elevará el pago total a cerca de 24.000 euros.
Varios meses después de este suceso, la propia empresa envió una carta a todos sus clientes advirtiendo de que «la junta de la tapa podría no funcionar correctamente» en todas aquellas unidades facricadas entre octubre de 2012 y agosto de 2014 y aseguraba en la misiva que el fallo fue detectado «en preparados de crema», indicando que “la comida caliente podría salir fuera del vaso, pudiendo producir en algunos casos quemaduras”.
La sentencia no es firme y podrá ser recurrida ante la Audiencia Provincial de Madrid, aunque la indemnización deberá ser abonada de inmediato.