- Fue asesinada por violencia de género el pasado 16 de agosto en Tetuán.
- En la segunda reunión que cierra este Comité de Crisis se acuerda ofrecer apoyo psicológico especializado a su hijo, de ocho años de edad, si el padre lo estima conveniente.
- Tenía 48 años y figura en VioGén (Sistema de Seguimiento integral en casos de violencia machista).
El Comité de Crisis María Pilar Cardeñoso ha concluido, tras reunirse en dos ocasiones desde el pasado 22 de agosto, con el ofrecimiento a su hijo de ocho años de edad, apoyo psicológico especializado, siempre que el padre lo considere oportuno, así como la toma en consideración de otras medidas para mejorar y reforzar los esfuerzos municipales para ofrecer apoyo a las víctimas de la violencia machista.
El Comité de Crisis de María Pilar Cardeñoso estudió la información que consta en los diferentes recursos con que cuenta la red de violencia en el ámbito familiar concluyendo que no consta que la víctima hubiera sido atendida en ninguno de los recursos especializados, si bien, el informe señala que María Pilar Cardeñosa figuraba en VioGén (sistema de seguimiento integral de los casos de violencia machista) desde el año 2018, tras una agresión detectada por una patrulla policial que no fue denunciada por la mujer.
De igual manera, el informe subraya la necesidad de incidir en la mejora de los mecanismos de identificación temprana por parte de los recursos municipales, el lanzamiento de campañas de concienciación que faciliten a las posibles víctimas y sus allegados la detección de la violencia machista así como dirigir determinados mensajes para incrementar la percepción de riesgo de las mujeres, desmontando “el mito” de que una relación recién iniciada esté exenta de violencia machista.
El informe también señala la importancia de fomentar la coordinación entre la Jefatura de la Policía Nacional y el Ayuntamiento de Madrid; continuar haciendo partícipes a las comunidades de vecinos para que las víctimas de violencia de género puedan acudir a ellos en caso de necesidad; reforzar acciones encaminadas a no normalizar la violencia machista, sobre todo en adolescentes; y sensibilizar a los medios de comunicación para incorporar buenas prácticas en términos de violencia de género eliminando estereotipos relacionados con la condición social, la étnica, la edad o cualquier prejuicio previo.