Ya el pasado 19 de agosto Samur Social tuvo que desalojar a las más de 50 personas alojadas en sus instalaciones de la Carrera de San Francisco después de encontrarse chinches en ellas.
Una nueva plaga de chinches vuelve a afectar a dependencias municipales en Madrid. Concretamente, el edificio afectado es el Centro de Acogida Municipal San Isidro para personas sin hogar, situado en el distrito madrileño de Moncloa-Aravaca.
Al parecer, la plaga de chinches habría afectado a 4 de las 114 habitaciones del centro, primero a una de ellas y luego se extendió a las demás, ante lo que el Ayuntamiento ha activado el protocolo correspondiente y ha desalojado a los 300 residentes de esa zona, que pasarán las próximas noches en una sala habilitada temporalmente.
El desalojo durará mientras se apliquen medidas contra esta plaga, aproximadamente unas tres semanas. Técnicos especialistas de Madrid Salud llevarán a cabo una inspección detallada, para poder localizar el orígen del problema y, posteriormente, erradicarlo.
Al parecer, esto suele ocurrir «con cierta frecuencia» tanto en estas dependencias como en otras residencias similares de carácter privado, debido a que algunas de las personas que acuden a estas instalaciones lo hacen en condiciones higiénicas muy precarias.
Una plaga de chinches obliga a evacuar el Samur Social de Madrid
El personal del Samur Social, el Servicio Social de Atención Municipal a las Emergencias Sociales de Madrid, procedió a evacuar el pasado lunes, 19 de agosto, a las más de 50 personas alojadas en sus instalaciones de la Carrera de San Francisco después de encontrarse chinches en ellas y activarse el protocolo correspondiente. Según fuentes municipales, podrán volver a partir del 10 de septiembre.
La plaga se detectó el lunes 12 y se comenzaron a aplicar medidas de desinfección el miércoles 14. A pesar de ello, las chinches reaparecieron en otra planta del edificio, desalojándose finalmente ese lunes 19. Técnicos especialistas de Madrid Salud llevaron a cabo una inspección detallada, para poder localizar el orígen del problema y, posteriormente, erradicarlo.
Algunos de los trabajadores sufrieron además picaduras de dichos bichos, teniendo que dejar su ropa en bolsas, aplicarse duchas descontaminantes y portar trajes especiales. Sin embargo, a pesar de estas medidas tan restrictivas, una de las empleadas contaminó su propia casa. Finalmente, Samur Social anunció que las más de 50 personas afectadas podrán volver el 10 se septiembre.