La Comunidad de Madrid invertirá 1.203.350 euros en implementar en Metro de Madrid el Plan de Celdas Reversibles, que contempla instalar equipos de recuperación de energía en los centros de tracción de las estaciones de La Moraleja, Barrio del Puerto, La Peseta y Hospital de Móstoles, entre otros.
Las celdas reversibles permitirán reducir el nivel de contaminación y mejorar la calidad del servicio, así como un ahorro medio estimado en 650 MWh anuales cada una –el equivalente al consumo energético anual de 200 hogares medios–, de acuerdo con los primeros análisis y pruebas piloto.
El plan de instalación de las celdas reversibles consta de diversas fases. Actualmente, ya se han instalado en el centro de tracción de la estación de La Moraleja (línea 10B), donde comenzarán a funcionar en pruebas a finales del mes de marzo.
También se están implantando celdas reversibles en las estaciones de Barrio del Puerto (línea 7B), La Peseta (línea 11) y Hospital de Móstoles (línea 12), donde empezarán a funcionar de forma escalonada antes de concluir el verano.
Proyecto piloto en Campo de las Naciones
Tras el proyecto piloto desarrollado por Metro entre los años 2014-16 en la estación de Campo de las Naciones, y comprobar que los resultados eran muy satisfactorios, Metro de Madrid ha iniciado un plan de desarrollo e implantación de celdas reversibles destinadas a aprovechar la energía procedente del frenado de trenes para el funcionamiento de otras instalaciones de la red (ascensores, escaleras mecánicas, torniquetes, etc).
Hasta el momento dicha energía de frenado solo podía ser utilizada por otro tren, siempre que estuviese cercano al primero, pero a partir de ahora dichos equipos de recuperación diversificarán su uso y conseguirán mayor aprovechamiento.
La implantación de estos equipos implicará un menor consumo de energía menor contaminación y emisiones de CO2, mejorando la calidad del medio ambiente en general de la ciudad. Además, la recuperación de energía de frenado evitará que se desperdicie en forma de calor en túneles y estaciones, incrementando el confort para los usuarios y reduciendo los recursos destinados a bajar la temperatura de las instalaciones a través de la ventilación y la climatización. Las consecuencias demuestran el compromiso de Metro de Madrid con el respeto al medio ambiente, la sostenibilidad y la calidad del beneficio.
Se prevé amortizar la inversión en apenas seis años, gracias a la reducción de la facturación energética que permitirá este nuevo sistema, considerado estratégico para la compañía.
Consorcio europeo MyRails
Gracias al compromiso de implantación del Plan de Celdas Reversibles, Metro de Madrid entró a formar parte del consorcio europeo MyRails, un proyecto de I+D subvencionado por la Unión Europea para el estudio y desarrollo de medidas de energía específicas del sector ferroviario destinadas a implementar tecnologías eficientes en el ámbito de la energía.
Dentro de este macroproyecto europeo, liderado por el Instituto Nazionale de Ricerca Metrologica (INRIM) de Italia, están involucrados países como Francia, Italia, Holanda, República Checa, Reino Unido y Suiza. España participa a través de la Fundación para el Fomento de la Innovación Industrial, la Universidad Pontificia de Comillas y Metro de Madrid.