El eje viario formado por las calles Magdalena, Duque de Alba, San Millán, Plaza de la Cebada, y la Carrera de San Francisco será remodelado para mejorar el tránsito peatonal y la accesibilidad, creando un gran eje de prioridad peatonal.
Todas estas calles serán remodeladas para mejorar el tránsito peatonal, la accesibilidad, y para recualificar el espacio público mediante nueva pavimentación, plantación de arbolado, renovación del mobiliario urbano e instalación de un alumbrado público más sostenible. Para ello, la Junta de Gobierno autorizó estas obras el pasado mes de diciembre por un importe de 3.979.393 euros.
Desde este jueves se están iniciando las obras de reurbanización del eje viario constituido por las calles Magdalena-Duque de Alba-San Millán-Plaza de la Cebada-Carrera de San Francisco, llamado la fase 1A. Estos trabajos consisten principalmente en ampliación y renovación de aceras, mobiliario urbano, incremento de especies arbóreas, iluminación más eficiente y renovación del pavimento de calzada.
El plazo de ejecución de la obra es de 12 meses, y el comienzo ha tenido lugar el 27 de septiembre. Para causar las menores molestias se ha dividido la obra en varias fases, intentando respetar el tráfico peatonal y de vehículos. Para ello, se instalarán en cada momento la información y la señalización correspondientes a los desvíos que sean necesarios realizar. La fase 1A que se ejecuta ahora, se ha iniciado el 27 de septiembre y tiene una duración prevista de 11 semanas.
La fase 1A corresponde a la margen izquierda de la Carrera de San Francisco, del número 1 al número 15. Los trabajos consisten en la demolición de la acera actual, afectada por el cambio de configuración de la calle y posterior pavimentación.
En cuanto a calzada se seguirá manteniendo la circulación en ambos sentidos en todo el tramo. En cuanto a las zonas peatonales, las aceras deben ocuparse en su totalidad, no obstante, se mantendrá un pasillo de 1,50 m de ancho, convenientemente vallado, permitiendo el mantenimiento de la actividad comercial.
«Dar una continuidad al eje Atocha-Latina»
Tal y como explicó el arquitecto municipal durante su intervención en un acto abierto con vecinos sobre el proyecto el pasado mes de febrero, en el pasado se realizaron en la ciudad de Madrid “intervenciones sin continuidad cuyo resultado fue una red peatonal desconectada y dispersa. Para darle coherencia a todas ellas, en los últimos años se están realizando una serie de microintervenciones y creando estructuras de movilidad peatonal, que desincentiven los desplazamientos en coche al centro y que promuevan el uso de transportes alternativos como la bici o el transporte público”.
Apoyados en la proyección de planos y fotografías, los responsables del proyecto explicaron que la movilidad a pie se verá mejorada con la reordenación de la sección viaria mediante la ampliación del espacio peatonal y la renovación del pavimento, que a día de hoy se encuentra en un avanzado estado de degradación.
El ancho mínimo de las aceras será de 1,80 metros y se mejorarán las condiciones de los cruces con rebajes de acera, pasos de peatones sobreelevados, pavimentos pododáctil y nuevos pasos para peatones.
Los carriles de circulación de vehículos verán reducida su anchura hasta lo estrictamente necesario para permitir su tránsito y el giro en condiciones de seguridad incluso para los de mayor tamaño, calmando el tráfico al disminuir la velocidad y generando más seguridad y menos ruido. Las calzadas contarán con nuevas reservas de motos y bicis reduciendo su presencia sobre las aceras.
La calidad espacial de las calles se verá mejorada potenciando y recuperando el carácter de zona peatonal y estancial de determinados entornos como Puerta de Moros o las calles San Millán y Duque de Alba, estableciendo plataforma única de adoquín de granito.
Mejoras en las condiciones de circulación de vehículos en calzada
El objetivo de esta reforma no es sólo mejorar el tránsito peatonal por este eje viario, sino también impulsar la convivencia y el encuentro creando un espacio público con entornos agradables en los que apetezca estar. Aunque la circulación se verá reducida al eliminar el aparcamiento de rotación primero y con la entrada del nuevo Área de Prioridad Residencial después, el tráfico rodado también se verá mejorado.
Nuevos firmes y pavimentos de calzada, transformación del cruce giratorio de las calles Toledo, Plaza de la Cebada y San Millán a una intersección en cruz semaforizada, y reordenación de las bandas de aparcamiento mejorarán las condiciones de circulación, visibilidad y maniobra de los vehículos de un distrito incluido en la almendra central de la ciudad, en la que el 42,8% de los hogares no tiene automóvil y el 89,5% de sus habitantes se desplazan a pie a diario, empleando el coche sólo un 18,7%.
Mobiliario urbano, iluminación y arbolado
La actuación también contempla reordenar los elementos necesarios y eliminar obstáculos que representen barreras arquitectónicas, la instalación de nuevos bancos (como una de las vecinas asistentes solicitó en su intervención), de horquillas aparcabicis, la renovación del alumbrado público con luces LED, más eficientes y sostenibles, así como una revisión del estado del arbolado existente, eliminando ejemplares en mal estado, transplantando y reubicando los que representen un obstáculo para el tránsito e incorporando nuevos ejemplares para aportar mayor confort ambiental y bioclimático.
Plazas de aparcamiento
Varios asistentes se interesaron durante el acto del pasado ems de febrero por conocer cómo afectará la reforma a las plazas de aparcamiento de residentes, a lo que el concejal presidente del Distrito respondió que ”la pérdida de plazas de estacionamiento en las calles que forman parte del itinerario como consecuencia de la conversión de aparcamientos en batería en aparcamientos en línea, se compensará con un aumento del número de plazas para residentes en las próximas semanas, antes de que comiencen las obras”.
Esto será posible gracias a los trabajos de repintado que ha llevado a cabo el Área de Medio Ambiente y Movilidad. 338 nuevas plazas azules han pasado a ser verdes en el entorno de las dos zonas SER implicadas.
- Barrio de Embajadores. 192 plazas pasan de azul a verde.
- Barrio de Palacio. Son 146 las nuevas plazas para residentes.
- Barrio de Sol. 40 plazas azules se han convertido en verdes.