- Hoy, día 3 de abril de 2018, y tras más de un año de intensa negociación, el Área de Salud, Seguridad y Emergencias del Ayuntamiento de Madrid ha alcanzado un acuerdo con las centrales sindicales CCOO, UGT, y CSIF.
- Se trata de un preacuerdo en el que se determinan las condiciones laborales y de jornada del Cuerpo de Bomberos, y con el que se garantiza la cobertura y operatividad del servicio y la mejora de la calidad de su prestación para dar respuesta a las exigencias en materia de seguridad y emergencias de la ciudad de Madrid.
El delegado del Área de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, ha firmado hoy un acuerdo con representantes sindicales del Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, al que se ha llegado tras más de un año de intensas negociaciones. En el acto han estado presentes el director general de Emergencias y Protección Civil, Ignacio Becerril, y el coordinador general de Seguridad y Emergencias, Daniel Vázquez. Este acuerdo, que por primera vez unifica en un único texto las condiciones de trabajo de la escala operativa y la escala de mando, ha contado con un amplio respaldo dentro del colectivo, superando el 80 % de apoyo por parte de la plantilla.
Tras la finalización del anterior Acuerdo Sectorial (2011-2015), y sus correspondientes prórrogas, las Secciones Sindicales de UGT y CCOO en Bomberos del Ayuntamiento de Madrid, iniciaron una ronda de contactos con la Corporación con el objetivo de negociar las condiciones laborales y de jornada de todo el colectivo, cuyo único resultado fue, según los sindicatos, «una Corporación prisionera de la presión ejercida por el Gobierno de la Nación en su constante fiscalización e impugnación de los Acuerdos adoptados en las mesas de Negociación Colectiva, en unos casos propiciado por los tacticismos económico-políticos del Ministro de Hacienda Cristóbal Montoro, y en otros por el tutelaje interesado de la Delegada Dancausa, quien a buen seguro intentaba lavar así su imagen, tras su imputación en la denominado Caso Mercamadrid».
«Esta paralización -indican desde UGT y CCOO- provocó un enfrentamiento que ha durado más de un año, y que ha perjudicado notablemente tanto a la plantilla del Cuerpo de Bomberos como la seguridad de la ciudadanía madrileña.
«En este duro año, nos hemos encontrando buenas intenciones y buenas palabras pero sobre todo plazos que se han dilatado hasta la desesperación, forzando una espera “sine die”, en la que los decretos se impusieron como norma, época oscura a la que se le sumó el bloqueo de las cuentas municipales, como se ha reseñado anteriormente».
«Meses donde sólo se produjeron decretos de guardias obligatorias, forzando a trabajar sin descanso a una plantilla mermada de efectivos y obligando al colectivo a la adopción de diversas medidas de protesta, siempre refrendadas por todos los compañeros y compañeras en Asamblea General. Ante la falta de soluciones, se tomó la decisión de visibilizar nuestra reivindicación, trasladando la misma a la calle, donde se contó con el apoyo y la solidaridad de los vecinos y vecinas, a los cuales, una vez más, les damos las gracias», explican los sindicatos.
Añaden desde UGT y CCOO que «vista la masiva participación del colectivo, la Corporación modificó su voluntad de diálogo, siendo más proclive a sentarse a negociar unas condiciones de trabajo que desbloquearan la situación laboral que estaba llevando al deterioro en la calidad del Servicio de Bomberos y reconociendo al fin el exceso de horario que implica ser Bombero y funcionario público, tal y como se rigen en otros servicios de bomberos, como el de los compañeros de la Comunidad Autónoma».
Finalmente se ha alcanzado un acuerdo. Con él, explican desde el Ayuntamiento de Madrid, «se da cumplimiento a las necesidades de modernización y reestructuración del servicio, ajustándose a los compromisos adquiridos por el Ayuntamiento con la ciudadanía a través de su “Carta de Servicios”, donde se regulan las condiciones para la mejora de los estándares de calidad del Cuerpo de Bomberos».
Entre los puntos más importantes del mismo, «se da respuesta a las necesidades de cobertura del operativo durante todo el periodo anual, mediante el establecimiento de figuras como la jornada ampliada de adhesión voluntaria, la bolsa de guardias extraordinarias y figuras de compensación que permiten no sólo el mantenimiento de los efectivos diarios previstos, sino el refuerzo de los mismos en periodos previsibles o sobrevenidos de incremento de carga laboral».
Mejoras en formación y mayor operatividad
Igualmente, se adoptan importantes medidas que inciden directamente en la óptima operatividad del mismo, potenciando la formación, capacitación y condición física de sus integrantes. Se recoge asimismo «la implantación de un ambicioso plan de comunicación que fomente la implicación, la actualización de conocimientos y la participación activa de los trabajadores en el desarrollo del servicio, así como una reestructuración y fortalecimiento del sistema de unidades especiales que permita al Cuerpo hacer frente a la diversidad y complejidad de los riesgos que llevan aparejados en estos tiempos sus esenciales funciones».
Todo ello, «dando respuesta a reivindicaciones históricas del colectivo de trabajadores y adquiriendo con los mismos el compromiso de seguir abordando y avanzando en cuestiones fundamentales como la prevención de riesgos, la modernización de su estructura, la revisión de los sistemas de selección, etc., dentro de la firme apuesta del Ayuntamiento de Madrid porque su Cuerpo de Bomberos ocupe el puesto de referencia que le corresponde. Además, el acuerdo cumple con los objetivos de conciliación y del plan de igualdad».
Plazas de bombero
El Cuerpo de Bomberos del Ayuntamiento de Madrid está formado por más de 1.400 profesionales clasificados en la escala técnica y operativa. Aun así, se ha detectado un déficit de plantilla como consecuencia de la falta de planificación en años previos a 2015, en los que no se realizaron las convocatorias necesarias para mantener la plantilla.
Desde el Área de Salud, Seguridad y Emergencias, explican, «se están llevando a cabo los pasos necesarios para paliar el déficit de plantilla, con una planificación que garantice el servicio los próximos años. Entre otras decisiones estratégicas, destacan las nuevas convocatorias de plazas públicas: 75 bomberos conductores que estarán operativos a finales del 2018 y 85 plazas de bomberos especialistas planificadas para principios del 2019».
En definitiva, en los próximos años se cubrirá el 100% de la tasa de reposición, hasta llegar a dimensionar la plantilla a las necesidades de la ciudad y del propio cuerpo de bomberos. En este sentido, se instará a la Administración General del Estado a sacar una convocatoria extraordinaria de plazas.