Metro de Madrid ha decidido extender la prueba piloto de puertas abiertas, en marcha desde el pasado 12 de febrero en la estación de Alsacia (de la Línea 2), a otras estaciones de la red del suburbano con diferente demanda de viajeros. Con ello se pretende continuar evaluando cómo reaccionan los viajeros y recopilar más referencias y datos de este sistema en diferentes situaciones.
De esta forma, Metro podrá comprobar esta nueva modalidad en estaciones con mucha y poca demanda y también con afluencia masiva, en algunas ocasiones, como es el caso de la estación de Feria de Madrid, cuando en IFEMA se realizan ferias que suponen muchos asistentes.
Con esta iniciativa, la Comunidad de Madrid quiere comprobar la mejora de la fluidez de los viajeros en las estaciones, ya que pueden pasar sin tener que esperar a que se abran las puertas, lo cual supondrá un ahorro en la espera y el paso más rápido de viajeros, sobre todo en momentos de gran afluencia.
Asimismo, esta medida supondría un ahorro en el mantenimiento, ya que las puertas son algunos de los elementos que más se usan de toda la red: se ha calculado que la actividad de las puertas se reduciría en un 75 %. Un sistema que además repercutiría en el consumo energético, ya que las puertas no necesitarían de energía para abrirse y cerrarse constantemente.
La estación de Alsacia permanece con las puertas abiertas, tanto para entrar como para salir de la estación, desde el pasado 12 de febrero y, ahora, debido a los resultados satisfactorios obtenidos en esta primera prueba piloto, la experiencia se extiende a otras tres estaciones de distintas características.
Metro informa a través de cartelería en cada una de estas estaciones donde se va a llevar a cabo, sobre este nuevo sistema de acceso a los viajeros que igualmente tendrán que validar su título de transporte porque si no lo hacen las puertas se cerrarán impidiendo su entrada.