«La situación actual es totalmente desalentadora para los profesionales, que ven en el incumplimiento del compromiso de reconocimiento de Carrera, la gota que colma un vaso repleto de promesas y acuerdos incumplidos», por lo que el sindicato reclama «respeto a los profesionales y el cumplimiento de los acuerdos».
CCOO considera que la Sanidad Madrileña necesita una Consejería de Sanidad «que aborde con rigor y eficiencia los grandes problemas de la sanidad madrileña y de sus profesionales. En la actualidad, no parece que el titular de la Consejería tenga la voluntad o la capacidad para hacer frente a este reto. Dos años después del nombramiento de Jesús Sánchez Martos, se ha desvanecido la confianza y expectativas depositadas en él, puesto que la realidad es que no ha habido, hasta la fecha, ningún cambio significativo en la política sanitaria de la Comunidad de Madrid, más allá de un discurso menos agresivo contra lo público y de la realización de todo tipo de promesas, cuyo único objetivo parece ser el evitar conflictos sin realizar cambios de fondo ni en la política sanitaria, ni en la política sobre los recursos humanos de la Consejería de Sanidad».
A finales del mes de diciembre de 2016, el Consejero de Sanidad, anunciaba en la Asamblea de Madrid, que el 1 de febrero de 2017 el Servicio Madrileño de Salud comenzaría a reconocer o actualizar la carrera profesional a los profesionales del SERMAS. Cinco meses después, la aprobación de la Ley de Presupuestos de la Comunidad de Madrid para el año 2017, con los votos a favor del Partido Popular y Ciudadanos, «demuestran una vez más, no solo la falta de credibilidad en cualquiera de las habituales promesas a las que nos tienen acostumbrados, sino sobre todo la falta de voluntad o de capacidad para dar cumplimiento a los compromisos adquiridos mediante Acuerdos suscritos por la Consejería de Sanidad y las Organizaciones Sindicales presentes en la Mesa Sectorial».
La aprobación del Art. 27 de la Ley de Presupuestos «reproduce un año más el no reconocimiento de niveles de carrera, lo cual es una burla a todos los profesionales de la Sanidad Madrileña que llevan meses recopilando documentación y entregándola a los Comités de Evaluación para su valoración, es una burla a todos los integrantes de estos Comités que llevan meses trabajando para nada, es una burla a la negociación colectiva y a todas las Organizaciones Sindicales que firmamos en la Mesa Sectorial un papel mojado también llamado Acuerdo, para la reactivación de los Comités de Evaluación, así como para la negociación y firma, antes del 31 de marzo, de un nuevo modelo de carrera profesional para todos los profesionales del SERMAS».
Para CCOO «se mantiene una lista de espera inasumible con las camas y plantillas actuales. Sin embargo, se incrementa año tras año el presupuesto dedicado a los conciertos y externalizaciones con el sector privado, mientras el presupuesto en inversiones es a todas luces insuficiente, para garantizar la actualización de la dotación tecnológica o abordar las obras de conservación y mejora de los centros sanitarios públicos».
«La situación también es totalmente desalentadora para los profesionales, que ven en el incumplimiento del compromiso de reconocimiento de Carrera, la gota que colma un vaso repleto de promesas y acuerdos incumplidos: no se elimina la minoración de los 200 euros de las guardias médicas, se mantienen unas plantillas deficitarias y no se sustituyen las ausencias por IT o permisos retribuidos, no se regula la ponderación de la jornada, se continua “contratando a dedo” en muchas centros sanitarios, incumpliendo sistemáticamente el acuerdo de contratación temporal y de movilidad o promoción interna temporal. A día de hoy, se mantienen 11.577 contratos eventuales en Hospitales, Atención Primaria y SUMMA 112 y se desoye el mandato del Tribunal Constitucional que posibilita la estatutarización del personal de Fuenlabrada, Alcorcón y la UCR, etc». Por tanto, CCOO, «como sindicato más representativo de la sanidad madrileña, exige el respeto a los profesionales y el cumplimiento estricto de los acuerdos firmados».
