El coordinador general de Medio Ambiente y Movilidad, José Antonio Díaz Lázaro, ha recogido el premio Demarcación que el Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos ha concedido, en la categoría de mejor obra pública en 2016, a los trabajos de adecuación y mejora de la estación regeneradora de aguas residuales (ERAR) de Viveros de la Villa, promovidos por el Ayuntamiento de Madrid.
La Junta Rectora de la Demarcación de Madrid del Colegio de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos convoca cada año estos premios con el objetivo de dar notoriedad y prestigio social a ciertas infraestructuras de reciente construcción, fundamentalmente en el ámbito de la Comunidad de Madrid.
La valoración de los candidatos a los galardones se basa en la calidad técnica constructiva y de diseño de la actuación, de manera que contribuya a la mejora de la calidad de vida de los ciudadanos y al respeto al medio ambiente.
La obra del Ayuntamiento de Madrid que ha resultado premiada ha sido la de de adecuación y mejora de los procesos avanzados de depuración de la ERAR de Viveros de la Villa. Los trabajos han supuesto una inversión de 9.873.662,49 euros y han sido cofinanciados por el programa de Fondos de Cohesión de la Unión Europea 2007-2013.
Mejora de la calidad de las aguas del Manzanares
El Ayuntamiento Madrid ha ejecutado estos trabajos en la ERAR de Viveros de la Villa de forma que permita una ampliación y mejora de los usos asociados al río Manzanares, y para cumplir las exigencias del Plan Hidrológico de Tajo de reducción de nutrientes de todo vertido que se produzca en su área de influencia.
La solución adoptada ha consistido en la sustitución de los sistemas de filtración de arena existentes en la planta de tratamiento por un nuevo sistema de microfiltración mediante malla textil, que garantice una adecuada eliminación de sólidos y parásitos del agua, así como la ejecución de un nuevo tratamiento terciario, mediante una desinfección avanzada con ozonización, dosificación de peroxido de hidrogeno y un sistema de lámparas ultravioleta.
La adecuación de estas instalaciones se une a las actuaciones ya ejecutadas por el Ayuntamiento durante los últimos años, con el objetivo de alcanzar un buen estado ecológico de las aguas del río Manzanares, situando a la ciudad de Madrid en una posición destacada en la gestión de sus recursos hídricos y la protección del Medio Ambiente.