La Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo de Madrid ha presentado alegaciones para continuar la línea de investigación sobre la venta de 18 promociones municipales a FIDERE, cuya apertura de diligencias inició la semana pasada la Fiscalía del Tribunal de Cuentas.
Así, la EMVS se adhiere al Ministerio Fiscal en su iniciativa de nombrar un Delegado Instructor para la causa, al considerarlo pertinente para que practique las diligencias necesarias en la depuración de hechos y análisis de toda la documentación necesaria para “dirimir la responsabilidad contable” que pudiera darse de la enajenación de 1.860 viviendas de alquiler municipal en 18 promociones al fondo FIDERE.
En el escrito dirigido al Tribunal de Cuentas, la EMVS solicita que “se analice la intermediación inmobiliaria contratada para la venta de los inmuebles, por el que se abonaron 2.392.775€, mediante dos facturas, de diciembre de 2013 y de enero de 2014, de las que aparentemente se derivan irregularidades tanto en el propio encargo, como en su ejecución y pago”, según consta en el Informe del Tribunal de Cuentas. Sobre este punto, además de constatar que el importe facturado es superior al establecido en los pliegos y que las facturas carecen de conformidad y sello oficial de la empresa, la EMVS afirma “que no resulta acreditada la realidad material del trabajo de intermediación que se dice haber realizado”.
La EMVS también considera del todo necesario que se “analice y determine la valoración del daño patrimonial causado la Sociedad por el precio establecido y finalmente ingresado en las operaciones de enajenación”.
Analizado el informe de la Cámara de Cuentas sobre la venta de las 18 promociones a FIDERE, en el que se revelaban graves irregularidades que podían incurrir en responsabilidad contable por parte de los antiguos gestores de la EMVS, la actual dirección entiende que se ha ocasionado un grave quebranto al patrimonio municipal “al resultar que el importe de venta fue inferior al de mercado, existiendo, además, una ausencia de valoración de los bienes a enajenar y una ausencia del precio en el contrato”. En el documento de alegaciones presentado al tribunal, la EMVS afirma que “la operación se realizó sin contar con un valor cierto y objetivo de los bienes a enajenar, sin tasación previa alguna, y siendo el precio final de la compraventa unilateralmente fijado por el comprador”.
El Consejo de Administración de la EMVS había facultado a su Consejero Delegado para ejercer las acciones necesarias por la responsabilidad contable que puedan derivarse de este procedimiento ante el Tribunal de Cuentas o de cualquier otra instancia judicial. De este modo, la empresa municipal se adhiere también a la apertura del procedimiento penal iniciado en su día por la Asociación de Afectados de la venta de Viviendas de la EMVS y que se había sobreseído.