Mañana miércoles, 11 de mayo, los trabajadores de Banco España-Duero (CEISS), filial de Unicaja Banco, se concentrarán en Madrid, ante la oficina principal de Unicaja (Virgen de los Peligros, 5), para protestar contra el ERE «salvaje» que pretende despedir a 1.120 personas (una de cada tres).
El banco castellano y leonés tiene actualmente 3.202 empleados (415 en Madrid, repartidos en 60 oficinas urbanas además de en los Servicios Centrales de la calle Marqués de Villamagna y calle Titán, que posiblemente quedarán desmantelados).
Según un comunicado emitido por el sindicato CCOO, «Grupo Unicaja solo ha presentado informes desproporcionados que no compartimos sobre las causas para despedir, pero ni una sola palabra sobre un plan de viabilidad que vislumbre un mínimo de garantías para afrontar el futuro de la plantilla que finalmente se quede ofreciendo además indemnizaciones inaceptables por su baja cuantía».
Para CCOO, «Unicaja tiene una responsabilidad con su plantilla. Con un resultado de 183,8 millones en balance consolidado y uno de los mejores ratios de solvencia del sector, no puede pretender deshacerse de 1.120 personas en condiciones de auténtica miseria y absolutamente alejadas de las que se está pactando en el sector, y que no deberían ser aceptadas por el resto de sindicatos en la mesa, máxime cuando esta entidad ya ha sufrido dos ERE».
Por ello, CCOO, como primer sindicato en el grupo Unicaja, exige a la dirección del grupo «un cambio de postura radical en la negociación del ERE de CEISS mejorando las condiciones de salida de la plantilla y ofreciendo garantía de voluntariedad en la adscripción a las medidas».