El Área de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid ha decidido ampliar hasta el próximo 24 de mayo la limitación de velocidad en el tramo de la Calle 30 (M-30) que va desde la calle San Pol de Mar (kilómetro 19) hasta el Puente de los Franceses (kilómetro 21) a 70 km/h.
La razón de esta actuación en la M-30 es la previsión de altas lluvias durante la semana próxima, que pueden contaminar la toma de muestras necesaria para el estudio que se está llevando a cabo.
De este modo, continúa la limitación en sentido Norte de la M-30, en la calzada cercana a las casas, hasta el martes 17 de mayo a las 01:59 horas. En ese momento se pasará a limitar también la calzada en sentido Sur de la M-30.
Esta prueba piloto se extenderá entonces hasta las 01:59 horas del martes 24 de mayo, a no ser que las condiciones meteorológicas aconsejen la variación de días o fechas, principalmente debido a lluvias que puedan alterar el registro acústico de la zona.
Toda esta información está avisada en los paneles informativos fijos y variables de tráfico.
La reducción de la velocidad es parte de un protocolo activado por el Área de Medio Ambiente y Movilidad para minimizar el impacto acústico de la circulación de Calle 30 (M-30) en el entorno del paseo de Marqués de Monistrol.
El ruido de la zona, en estudio desde febrero
El pasado mes de febrero, la Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental perteneciente al Área dirigida por Inés Sabanés emitió un informe sobre el impacto acústico en esta zona, cuyas conclusiones fueron que combinando dos factores, la implantación del asfaltado fonoabsorbente y reduciendo la velocidad de los vehículos a 70 km/h frente a los 90 km/h actuales, se conseguiría reducir de forma significativa los niveles de ruido en las fachadas de las viviendas más próximas.
Para ello se ha redactado un protocolo de actuación para determinar, con datos reales, la disminución efectiva en el nivel de ruido ambiental como consecuencia de la disminución de la velocidad de circulación máxima permitida. Esta medida viene facilitada porque la velocidad en el interior del túnel colindante es de 70 km/h.
Esta prueba piloto, ejecutada en condiciones normales de circulación, permitirá cuantificar la posible disminución de ruido ambiente, y permitirá comprobar las incidencias circulatorias y su efecto sobre el entorno que pudiera suponer la rebaja de la limitación de la velocidad.
La Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental necesita unas dos semanas de análisis para evaluar la disminución del ruido, y emitirá un informe sobre las medidas a adoptar más efectivas para reducir las molestias por ruido a los residentes de la zona