La Comunidad de Madrid va a destinar nueve millones de euros a proyectos de innovación tecnológica aplicados a los centros de atención a personas con discapacidad. Esta medida, ya implantada en algunos recursos se extenderá hasta 2026 a un total de 18, beneficiando a 800 usuarios.
Así, la Consejería de Familia, Juventud y Asuntos Sociales ha introducido diversos dispositivos digitales dotados de sistemas interactivos de proyección de actividades visuales, que ayudan a ejercitar de manera individual o colectiva las habilidades sociales, la estimulación sensorial, la atención, el razonamiento o la psicomotricidad, entre otras.
Actualmente, esta metodología de trabajo basada en la innovación se aplica en varios centros de la capital, como los de Argüelles y el centro especializado en esclerosis múltiple Alicia Koplowitz, de Vicálvaro, y en los municipios de Fuenlabrada, Coslada, Aranjuez, Majadahonda, Villaconejos o Getafe.
Entre la tecnología implantada destaca la adquisición de varias Yeti Tablet, dispositivo electrónico que ofrece acceso a más de tres millones de aplicaciones para utilizar en actividades de desarrollo. Se trata de una herramienta ideal para el tratamiento de personas con autismo, parálisis cerebral, y discapacidad intelectual. También se han adquirido tres cañones interactivos portátiles, fácilmente manejables, que permiten proyectar sobre cualquier superficie plana y hacerla interactiva.
Igualmente, otros centros cuentan con pizarras digitales con las que los usuarios pueden escribir o dibujar con sus dedos y con lápices ópticos, y se han incorporado cuatro salas sensoriales diseñadas para estimular los sentidos de aquellos que tienen afectadas capacidades motoras o neurológicas.
Texturizadores, camas cota 0 y patios terapéuticos
Asimismo, se ha introducido la técnica de la texturización para evitar problemas de deglución. Con ella, se combinan los alimentos dándoles una consistencia suave y blanda, manteniendo los nutrientes, así como el color y el sabor de cada producto.
Este programa, además, incluye la adquisición de camas cota 0, especialmente diseñadas para brindar comodidad y seguridad a personas con enfermedades neurodegenerativas. Se caracterizan por no tener sujeciones, prevenir el riesgo de caídas y aumentar la autonomía y la movilidad.
Por último, el proyecto incluye la puesta en marcha de jardines terapéuticos que proporcionan circuitos de estimulación, relajación y juegos, para estimular las percepciones sensoriales de los usuarios, desde la olfativo-visual, gracias a plantas aromáticas y de colores, a la táctil, con muros de texturas.