El sistema de alerta rápida de productos peligrosos no alimentarios de la Unión Europea (antes conocido como RAPEX) ha informado de un problema de seguridad que podría conducir a un fallo inesperado del sistema de asistencia hidráulica de frenado, lo que obligaría a ejercer una mayor presión sobre el pedal de freno, originando una distancia de frenado mayor y un posible fallo del sistema ABS y del control de estabilidad, aumentando el riesgo de accidente.
Los automóviles de BMW afectados por este problema de seguridad son muy nuevos: fabricados entre junio de 2022 y enero de 2024. En concreto, los Serie 2, Serie 5, Serie 7, i5, i7, iX1, X1, X5, X6, X7, XM, X5M y X6M.
Hasta 25.000 automóviles si todos los modelos indicados estuvieran afectados, señala la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU). OCU entiende que BMW se irá poniendo en contacto con los propietarios de estos vehículos para resolver el problema, que deberá hacerse de forma gratuita y lo antes posible.
Además, recomienda preguntar al servicio de atención al cliente de la marca si su vehículo está entre los afectados, especialmente si se adquirió de segunda mano; en este caso lo más probable es que el propietario no esté en la base de datos de la marca.