La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha alertado de que el “grandísimo descontento ciudadano de izquierda a derecha” solo “puede ir a más”: “nos va la democracia en ello”. Así lo ha indicado tras participar en un encuentro organizado por Deloitte y ABC.
«Yo creo que hay un grandísimo descontento ciudadano de izquierda derecha. Cada vez son más los políticos de todos los partidos, incluido Izquierda Unida, PSOE, todos… que están en contra de lo que está sucediendo, porque nos va la democracia en ello», ha subrayado. Por tanto, «es un descontento general inmenso, que va a más y que, además, también se traduce en que los españoles, el pueblo, tiene derecho a manifestarse y hacerlo allá donde considere, mientras sea pacífico».
«Cosa diferente es que ayer, en la que se produjo en Ferraz un grupo de ultras parasitaran una parte de la manifestación», ha expuesto, recordando los disturbios de esta noche de martes frente a la sede nacional del PSOE con importante asistencia de los líderes de Vox, que acabaron con el lanzamiento de objetos a la Policía, tres violentos detenidos y destrozos del mobiliario urbano.
«Pero eso no tiene nada que ver con el grandísimo descontento que se está manifestando. Creo que los políticos tenemos que estar, los que somos actualmente representantes políticos, en otros escenarios», ha añadido. Por ejemplo, «nosotros el domingo estaremos en la Puerta del Sol, en Madrid también, manifestándonos contra no solo la amnistía, sino contra el pisoteo al que están llevando a la Justicia española».
«Y yo creo que más importante aún es lo que sucedió ayer. El señor Puigdemont imputado por formar parte de actos terroristas o que el Consejo General del Poder Judicial diga que el Gobierno está anteponiendo sus intereses a los de España, intentando socavar la alternancia política y el Estado de Derecho. Así que claro, lógicamente el descontento solo puede ir a más y más porque nos va la democracia a todos en ello. Esto es cosa de todos», ha concluido Ayuso.
«Saltarse la ley es y debe seguir siendo delito»
Por otro lado, Ayuso ha reclamado que «saltarse la ley es y debe seguir siendo delito si queremos que nuestro país sea un país fiable como lo ha sido durante décadas, que no negocia con la libertad ni trafica con la seguridad jurídica. Lo hemos visto una y otra vez: cuando cae el Estado de derecho, caen con él la libertad, la democracia, y, por supuesto, la prosperidad».
«Se destruye la convivencia, se atenta contra la vida y la dignidad de la persona, contra la propiedad y el libre mercado. Las instituciones y el tejido productivo, que había costado tanto consolidar, se deshacen. Quienes abusan, cometen delitos y son incapaces no pueden ocupar los puestos de poder», ha explicado la presidenta madrileña.
Para Isabel Díaz ayuso «no podemos dejar que esto le ocurra a España. La Comunidad de Madrid ha sido la primera en denunciar los riesgos, en ofrecer un modelo alternativo que funciona, y que estará siempre a la cabeza, en defensa de la libertad y la prosperidad de todos los españoles».
«Hoy negocian una quita de 15.000 millones de euros que mañana pueden ser 10 veces más. Madrid no tiene deudas, no queremos hipotecar a las generaciones futuras ni comprometer nada con el dinero que no nos pertenece y, sin embargo, otras administraciones, como, por ejemplo, ha pasado en Cataluña, víctima de una nefasta gestión, es la región que generó mayor incremento. De ahí que tuviera que recurrir al FLA y a un sistema de financiación autonómica diseñado para mejorar su financiación!, ha argumentado.
«Condonar deudas por interés político destroza nuestra imagen como país en el que se puede confiar, no es una mera cuestión de desigualdad de trato. La clave es el atentado contra la seguridad jurídica y la confianza, que es lo que sustenta la actividad económica en una democracia liberal», ha señalado, añadiendo que es la normalización de la arbitrariedad que destruye la fiabilidad de una nación y de sus regiones en los mercados internacionales… tú me prestas y ya veré si te lo devuelvo porque he cambiado de opinión y esto, además, también nos hace ser poco fiables ante nuestros ciudadanos, nuestras propias empresas».
«Es un incentivo al incumplimiento, a la falta de rigor, a la austeridad, a malgastar el dinero público, al incumplimiento presupuestario. ¿Qué efecto va a tener en el valor de la deuda de cada región y de España en los mercados o sobre las empresas, sobre los inversores? Es una pregunta que nos tenemos que hacer ahora cada día», ha concluido Ayuso su intervención.