Metro de Madrid reabre el miércoles, 27 de septiembre, parte del tramo de la Línea 1 cortado por obras de mejora y modernización de la vía desde el pasado 24 de junio, entre Sol y Valdecarros (19 paradas en total).
El tramo a abrir será el comprendido entre las estaciones de Sol y Nueva Numancia, lo que incluye las paradas de Sol, Tirso de Molina, Antón Martín, Estación del Arte, Menéndez Pelayo, Pacífico, Puente de Vallecas y Nueva Numancia. La excepción será Atocha, que se mantiene cerrada debido a las tareas de ampliación de la Línea 11 a su paso por esta zona. Por tanto seguirán cerradas las de Portazgo, Buenos Aires, Alto del Arenal, Miguel Hernández, Sierra de Guadalupe, Villa de Vallecas, Congosto, La Gavia, Las Suertes y Valdecarros. Estas estaciones reabrirán el 14 de octubre.
La Comunidad de Madrid dio comienzo el pasado día 24 de junio las obras de modernización de la vía en la línea 1 de Metro, entre las estaciones de Sol y Valdecarros (19 paradas en total), cuyo servicio estaba previsto reabrir totalmente este próximo mes de octubre. Sin embargo, parcialmente se adelanta la apertura al miércoles, 27 de septiembre.
Este corte ha dejado sin servicio de Metro a los distritos de Puente de Vallecas y Villa de Vallecas, con más de 350.000 habitantes, afectando a las estaciones de Sol, Tirso de Molina, Antón Martín, Estación del Arte, Atocha, Menéndez Pelayo, Pacífico, Puente de Vallecas, Nueva Numancia, Portazgo, Buenos Aires, Alto del Arenal, Miguel Hernández, Sierra de Guadalupe, Villa de Vallecas, Congosto, La Gavia, Las Suertes y Valdecarros.
El proyecto consiste en la eliminación del balasto (las tradicionales piedras que pueden verse en algunos tramos del recorrido) y las traviesas de madera actualmente existentes, para sustituirlos por una nueva plataforma de hormigón con lo que se renovarán los sistemas de sujeción y apoyo del carril, y se instalarán nuevos aparatos de vía de alta tecnología (dispositivos que gestionan el cruce o ramificaciones).
Esta modernización de sistemas conlleva la mejora en la atenuación de ruidos y vibraciones. También se optimizará todo el sistema de drenaje y la geometría de la ruta, lo que mejorará las labores de mantenimiento y reducirá las incidencias.