Los nuevos desarrollos urbanísticos piden paso. Asociaciones vecinales de 15 barrios de la Comunidad de Madrid y la FRAVM han presentado esta mañana en el Espacio Vecinal Paco Caño un documento de demandas dirigidas a los ayuntamientos y a las administraciones regional y estatal destinadas a «corregir el enorme déficit de equipamientos, dotaciones y servicios públicos que padecen».
El barrio de El Cañaveral, en el límite de Vicálvaro con Coslada, cuenta hoy con más de 12.000 vecinos, pero «carece de todo lo que hace de un barrio un lugar digno para vivir. No tiene colegio, ni centro de salud, ni instituto. No tiene centro cultural, ni polideportivo, ni biblioteca. Tampoco centro de mayores, parada de Metro, o búho (autobús nocturno.) Tiene, eso sí, una fuente pública, una única fuente para todo el desarrollo urbanístico, pero carece de semáforos, y la iluminación de sus calles es tan deficiente como la red de fibra óptica que permite acceso por cable a Internet».
Sin llegar al extremo de El Cañaveral, otros barrios de reciente creación de la comunidad autónoma madrileña viven una situación parecida. «Y es que aunque parezca mentira, los nuevos desarrollos urbanísticos se siguen levantando con el mismo esquema de hace 50 años, el mismo modelo que sirvió de abono para el nacimiento de las primeras asociaciones vecinales: primero se pone el ladrillo, a continuación llegan los vecinos y vecinas y, por último, se construyen las dotaciones y equipamientos, unos servicios que a menudo tardan lustros e incluso décadas en llegar», inciden.
Esta mañana, asociaciones vecinales de 15 nuevos barrios han levantado la voz ante este modelo cuyas consecuencias sufren a diario. “¡Ya basta de construir viviendas en barrios sin los equipamientos y servicios mínimos. Somos más grandes que la mayor parte de las capitales de provincia del país, pero no tenemos centros de salud, colegios, institutos, centros de mayores o polideportivos, y ya está bien”, ha indicado el presidente de la Federación Regional de Asociaciones Vecinales de Madrid (FRAVM), Quique Villalobos, y vecino de una de estas zonas, el Ensanche de Vallecas, en la presentación de un documento de carencias y demandas vecinales de estos lugares. Lo ha hecho junto a representantes de agrupaciones vecinales de Los Molinos (Getafe), Tempranales y Dehesa Vieja (San Sebastián de los Reyes), el PAU de Cuatro Vientos (Latina), Las Tablas (Fuencarral-El Pardo) y El Cañaveral (Vicálvaro).
El informe, de 64 páginas, recoge el enorme déficit de equipamientos y dotaciones públicas de estos territorios, así como las reivindicaciones principales de sus asociaciones y de las de otros ocho nuevos barrios: Legazpi-Méndez Álvaro (Arganzuela), Ensanche de Barajas, PAU de Arroyo del Fresno (Fuencarral-El Pardo), Montecarmelo (Fuencarral-El Pardo), Ecobarrio (Puente de Vallecas), nuevos desarrollos Alcalá (Alcalá de Henares), Barrio Vivero, Hospital y Universidad (Fuenlabrada) y el Barrio de La Luna (Rivas). «Es evidente que algunas de estas zonas ya no son tan nuevas, pero, aunque tengan más de 15 años, siguen sufriendo muchas de las carencias de los barrios más recientes», exponen.
El documento es fruto de un proceso de unión vecinal que, alentado por la FRAVM, se inició el pasado 28 de septiembre con una asamblea monográfica sobre la situación de los nuevos barrios. Desde entonces, una veintena de asociaciones han compartido «déficits, diagnósticos, experiencias y demandas, y ahora trasladarán estas últimas a las diferentes administraciones y a las agrupaciones políticas que concurrirán a los próximos comicios, con el fin de arrancar acuerdos y compromisos».
Con el título Demandas de los nuevos barrios ante las elecciones municipales y autonómicas, el informe refleja las particularidades de cada uno de los 15 lugares citados y las prioridades de sus asociaciones vecinales. Particularidades que muchas veces tienen que ver con focos de contaminación y otros problemas como el aeródromo de Cuatro Vientos, la incineradora de Valdemingómez, la fábrica Corrugados Getafe o los nudos de autovías que rodean El Cañaveral.
Los 15 nuevos barrios comparten enormes carencias en materia de equipamientos sanitarios, educativos, culturales y deportivos, comunicaciones, zonas verdes y transportes. «Si sumamos las demandas de sus asociaciones vecinales, que la FRAVM ha hecho suyas, necesitamos que el Gobierno regional y los ayuntamientos de esas zonas» pongan en marcha los siguientes equipamientos y servicios públicos:
– 6 escuelas infantiles
– 6 colegios de primaria
– 13 institutos de secundaria (5 con Formación Profesional)
– 10 centros de salud
– 11 bibliotecas
– 7 centros deportivos
– 6 centros culturales
– 3 mercados municipales
– 2 comisarías
– 2 Escuelas de Idiomas
– 3 escuelas de música
– 2 estaciones de Metro (El Cañaveral y Cuatro Vientos) y una nueva boca de Metro (barrio Vivero Fuenlabrada)
– 3 residencias públicas de mayores o pisos tutelados
– 2 centros de mayores
– 5 carriles bicicleta
– 8 zonas piden ampliación de líneas y frecuencias o nuevas líneas de autobuses urbanos
– 6 zonas piden mejoras en zonas verdes
– 7 zonas piden mejoras en conexiones y vías de comunicación
Puedes descargarte el documento completo de demandas, que está sujeto a la ampliación de otros barrios y asociaciones, en el siguiente enlace de la web de la FRAVM.
