El Ayuntamiento de Madrid ha recibido esta mañana, de la mano de la Federación de Municipios y Provincias de España (FEMP), el ‘I Premio a las Buenas Prácticas Locales Por la Economía Circular´ por su compromiso con la implementación de una movilidad urbana más sostenible, materializado a través del fomento del uso del transporte público con la creación de las Líneas Cero, en febrero de 2020, y los viajes gratis en toda la red de autobuses de la Empresa Municipal de Transportes (EMT), en momentos clave, para reducir el impacto del uso del vehículo privado en la ciudad.
Durante el acto, celebrado en el municipio gaditano de San Fernando y enmarcado en la Jornada Economía Circular y Entidades Locales de la FEMP, el delegado de Medio Ambiente y Movilidad del Ayuntamiento de Madrid, Borja Carabante, ha trasladado a los presentes el resultado de las medidas premiadas, recogidas en la Estrategia de Sostenibilidad Ambiental Madrid 360 y encaminadas a “compatibilizar las necesidades de movilidad de los ciudadanos” con la “mejora de la calidad del aire” en una ciudad “donde se producen 12 millones de desplazamientos y en la que la movilidad debe pivotar sobre el transporte público”.
De ahí la importancia de unas iniciativas que han logrado que, en palabras de Carabante, “un tercio de los 24.287.864 de usuarios que se han beneficiado desde febrero de 2020 de los viajes gratis en las Líneas Cero y los periodos de gratuidad en los autobuses madrileños no fueran viajeros habituales del transporte público”, Ese tercio se traduce en 8.327.086 ciudadanos que se desplazaron en autobús sin tener ningún título de transporte.
Unas medidas pioneras para el fomento de la movilidad sostenible
El delegado de Medio Ambiente y Movilidad ha recordado durante el encuentro el origen de las Líneas Cero municipales, que nacieron hace dos años para incentivar en los ciudadanos el uso preferente del autobús en el distrito Centro de la capital, que cuenta con una Zona de Bajas Emisiones. Con este fin, el Consistorio unió dos grandes nodos de transporte como Atocha, principal puerta de entrada a la ciudad, y el intercambiador de Moncloa, con dos líneas que llegaran hasta estos puntos cubriendo los desplazamientos de norte a sur y de este a oeste de manera gratuita.
Carabante ha señalado que el Ayuntamiento de Madrid fue pionero en la puesta en marcha de la gratuidad de los viajes en las diferentes líneas de autobús en jornadas con previsión de altos niveles de tráfico. Esta medida, que arrancó tras el paso de Filomena en enero de 2021 ante el mal estado de las carreteras y la necesidad de no utilizar los vehículos privados, se ha activado ya en nueve ocasiones, beneficiando, hasta la fecha, a más de 8.327.086 usuarios, de los cuales 2.972.414 no contaban con ningún título de transporte.
Tras Filomena, la gratuidad se implantó de nuevo del 1 al 15 de septiembre de 2021 con motivo de la vuelta al colegio de los escolares. Posteriormente, se estableció durante el Black Friday, en noviembre, logrando superar por primera vez las cifras de demanda de autobús previas a la pandemia. La iniciativa se activó de nuevo en 2022, tras el regreso de los escolares a las aulas en enero y en Semana Santa. Durante los días 28, 29 y 30 de junio se la medida se reactivó con motivo de la Cumbre de la OTAN y el pasado septiembre, para acompañar la vuelta al trabajo y a los colegio los días 1, 7 y 8 del mes. La última jornada con servicio gratuito de autobuses fue el pasado 3 de octubre.
Esta actuación continuará llevándose a cabo en próximas jornadas identificadas con un alto nivel de tráfico como son el Black Friday, el primer laborable posterior al puente de diciembre, la vuelta al colegio tras las vacaciones de Navidad o el regreso a la actividad tras la Semana Santa. Se contempla, además, que se active la gratuidad para los autobuses madrileños durante los episodios de alta contaminación.
Un reconocimiento al compromiso medioambiental
Los premios de la FEMP se convocan con el objetivo de recopilar y difundir las actuaciones desarrolladas por las entidades locales españolas en el ámbito de la economía circular. Se reconocen así los esfuerzos en la prevención y reducción de los residuos, la reducción del impacto global de la utilización de los recursos naturales y la eficiencia de su uso con el fin de proteger el medio ambiente y la salud humana y de favorecer la transición hacia una economía circular y baja en carbono.