El “Plan de actuación 2022-2025”, presentado al Pleno del Real Patronato del Museo Nacional del Prado el pasado 22 de noviembre y aprobado por el Presidente del organismo, el Ministro de Cultura y Deporte, mediante Orden Ministerial de 15 de diciembre de 2021, establece la hoja de ruta de la institución para los próximos cuatro años y expresa la visión sobre cuál ha de ser su papel en la sociedad como institución cultural de referencia “comprometida con todos los públicos, referente de accesibilidad universal y en integración social y cultural”.
Además, en otros aspectos, subraya la necesidad de renovar “su discurso expositivo acorde con las nuevas líneas de investigación y la búsqueda permanente de la excelencia”. El Plan, que ha sido elaborado por la dirección del Museo, establece los cinco grandes objetivos en los que se encuadrarán todas las actividades del Prado y que son los siguientes: normalizar el museo, en términos económicos y de públicos, tras el impacto de la pandemia de la COVID-19; responder a las nuevas demandas culturales y alcanzar la excelencia en el cumplimiento de las funciones del museo; reposicionar la colección del museo en el contexto nacional mediante una nueva política de depósitos del llamado “Prado Disperso”, bajo un marco de colaboración institucional; adecuar la gestión e infraestructuras de la institución, como servicio público, a las directrices modernizadoras de la Administración; y culminar la configuración del campus Prado con la adecuación y apertura pública del Salón de Reinos.
Estos cinco grandes objetivos enmarcan toda una serie de estrategias, hasta un total de veinticuatro, que se detallan en el documento y que se pueden consultar en https://www.museodelprado.es/museo/plan-de-actuacion Este documento debería haberse presentado hace un año, pero la excepcional situación de incertidumbre generada por el COVID-19 aconsejó postergar la elaboración de este Plan de Actuación y prorrogar el inmediatamente anterior (2017-2020) un año más, decisión que fue aprobada por el Pleno del Real Patronato el 21 de octubre de 2020.
El Museo Nacional del Prado se dota con este nuevo documento de una herramienta imprescindible para su gestión y ordena el marco de actuación de todas sus actividades. Además de seguir siendo la institución cultural española de referencia, va a ser una organización claramente comprometida con la transición digital, la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible y con la capacidad transformadora de la cultura como dinamizadora de otros sectores económicos.
A sus obligaciones adquiridas ante un renovado entorno social, político y presupuestario, el museo quiere asumir otras que nacen de una reflexión más interna y que invitan a enfatizar la vocación nacional del Prado, mediante una nueva política de depósitos (obras del museo instaladas en instituciones ajenas a las del propio museo y que se elevan a 3.241) que haga esta vinculación – geográficamente extendida prácticamente en todas las comunidades- aún más relevante. Esta vocación continúa la línea original e innovadora implantada desde 2019 con programas tan exitosos como “De Gira por España” o “El Prado en las calles”.
También se pretende reforzar la proyección internacional del museo, con el deseo de mantener y establecer nuevos lazos de colaboración y alianzas con organizaciones afines, como institución de referencia en la cooperación e intercambio de conocimiento y como estandarte y embajador de la proyección cultural de nuestro país.
La finalización del proceso de rehabilitación arquitectónica y adecuación museística del Salón de Reinos y su completa integración en el campus del Prado, se constituye como una referencia fundamental del trabajo de la institución durante la vigencia de este Plan de Actuación. Su consecución, además de dotar al campus Prado de una nueva infraestructura en la que terminar de desplegar todo el potencial de su colección y actividad museística, potenciará los valores históricos y patrimoniales de este singular edificio y su entorno, favoreciendo su integración en el área “Paisaje de la Luz”, recientemente declarada Patrimonio Mundial de la UNESCO en la categoría de paisaje cultural.