“Es escandaloso que el Gobierno de Almeida esté matando animales a tiros en plena ciudad de Madrid y que esta sea la forma que tienen de solucionar un problema complejo como el de la población de cotorra argentina en la ciudad”. Para la concejala de Más Madrid en el Ayuntamiento, Amanda Romero, lo ocurrido ayer en el parque Fuente del Berro, «además de ser un método de enorme crueldad para los animales, como mínimo ha asustado a la ciudadanía».
Amanda Romero registró ayer mismo una petición de información solicitando toda la documentación que explique los motivos por los que se ha autorizado el uso de carabinas para matar a las cotorras. “Es lamentable que este Gobierno esté matando animales en los parques. Como es lógico, la gente se ha asustado y preocupado, es una situación que no debe repetirse y que ha generado un revuelo enorme”, ha criticado la concejala de Más Madrid.
Para Romero, también es un «escándalo» que los propios pliegos de prescripciones técnicas del contrato de control y reducción de la cotorra argentina de Almeida «ya contemplaban esta posibilidad en situaciones específicas que debían estar debidamente justificadas y autorizadas». Por eso ha reclamado explicaciones y ha solicitado la siguiente información al respecto: «la justificación y los documentos legales correspondientes aportados por el adjudicatario del contrato para solicitar la autorización del uso de carabinas utilizadas para la eliminación de cotorras en el parque Fuente del Berro»; y «la autorización municipal expedida para el uso de carabinas en el parque Fuente del Berro».
230 euros por ejemplar
La población de cotorras argentinas, catalogadas por el Real Decreto 630/2013, de 2 de agosto, del Ministerio de Agricultura Alimentación y Medio Ambiente como invasoras, ha aumentado un 33 % de 2016 a 2019, pasando de los 9.000 ejemplares a los 13.000 en Madrid, según figura en el último estudio realizado por la Sociedad Española de Ornitología SEO/Birdlife.
Por ello, el Ayuntamiento de Madrid aprobó en julio el contrato de servicios de control y reducción de esta población, eliminando al 90% de ellas, y el gasto plurianual de 2,9 millones de euros, IVA incluido, como presupuesto del mismo para las anualidades de 2020 (382.000 euros), 2021 (1,5 millones de euros) y 2023 (un millón de euros), es decir, unos 230 euros por ejemplar. El plazo de ejecución es de 23 meses, iniciando su aplicación el pasado octubre.
Para ello, el servicio acordado se basaba en su «exterminio ético» mediante labores de captura de ejemplares adultos mediante diferentes métodos de trampeo y la esterilización y control de sus puestas (esterilización de huevos y colocación de nuevo en el nido de manera que imposibilite una segunda puesta). También se preveía el apeo de los nidos vaciados y su retirada al vertedero cuando se les haya capturado.
Sin embargo, vecinos del Parque de la Fuente del Berro han denunciado que la empresa contratada, Matinsa y Dypsa, está procediendo a su exterminio «a tiros». Una vecina ha llegado a grabar como dos hombres, uno de ellos con una carabina de aire comprimido al hombro, se pasean por el parque, previamente clausurado, dejando en su recorrido varios cadáveres de estos pájaros.
El Ayuntamiento de Madrid anunció que eliminaría a 11.000 ejemplares de cotorras, pero con un método ético. Una vecina ha grabado a dos personas matándolas así: a perdigonazos en el Parque de la Quinta de la Fuente del Berro.
¿De verdad?— Ibon Pérez (@ibonpereztv) November 25, 2021