“Nos vamos preocupados”. Con esta frase ha salido la portavoz socialista, Mar Espinar, de la reunión mantenida con las personas que integran el Comité de Empresa de la EMT, Empresa Municipal de Transportes de Madrid. La representación sindical ha trasladado al grupo socialista sus reivindicaciones y «la falta de voluntad negociadora» del Gobierno municipal.
“Desde aquí hacemos un llamamiento a la responsabilidad”, ha expresado Espinar, que se ha reunido con el comité acompañada del concejal Ignacio Benito, portavoz del grupo en Movilidad y vocal en el consejo de administración de la EMT. Espinar ha explicado que el PSOE “quiere conocer de primera mano sus reivindicaciones, ponernos a su disposición para aquello en lo que podamos mejorar el servicio público que se presta desde la empresa, y ayudarles en lo que podamos».
Ha recordado que Ignacio Benito lleva al próximo pleno una iniciativa “para que la EMT no pierda aquello que le da beneficios y que garantiza que el servicio público que estamos dando sea de calidad”. La proposición insta al pleno a dejar sin efecto la concesión de una empresa privada del aparcamiento de la plaza del Carmen, e iniciar el trámite para que sea la EMT la que lo explote.
La propuesta prevé además la subrogación de todas las personas empleadas en esta instalación y extender el modelo de gestión directa a todos los aparcamientos cuyas concesiones finalicen en 2022. Asimismo, prevé que una vez realizados los trámites oportunos, la gestión se realice también de forma directa en todos aquellos aparcamientos cuya concesión venza a partir del 1 de enero de 2023, así como todos los de nueva construcción.
Una red con beneficios
La EMT gestiona 23 aparcamientos públicos municipales con 10.000 plazas de rotación, abonos de larga duración, residentes, disuasorios, mixtos y soluciones para caravanas, motos o bicicletas, así como una red de recarga de vehículos eléctricos. Todos los estudios realizados sobre los aparcamientos de concesión muestran que son rentables y generan beneficios a las empresas concesionarias, por lo que en la anterior legislatura fueron varios los aparcamientos (Plaza de España, Montalbán, Plaza Mayor, Olavide y Fuencarral) que, llegado el plazo final de la concesión, pasaron a gestionarse de forma directa por la EMT.
Sin embargo, el Ayuntamiento de Madrid ha puesto en marcha un nuevo proceso de «privatización» que afectará, en primer lugar, al parking de Plaza del Carmen. Este aparcamiento generará ingresos muy superiores a los previstos por el pago del canon que hará la empresa concesionaria.
En 2022, vencerá la concesión de cinco aparcamientos (Cortes, Santa Ana, Jorge Juan, Ayala y Juan Bravo), y «la amenaza de que se siga este modelo privatizador tan lesivo para las arcas municipales
se cierne sobre dichos aparcamientos», según se razona en la proposición que defenderá el PSOE en el pleno de la próxima semana.