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La responsable de Cultura en el Grupo Municipal Socialista, Mar Espinar, considera que no se están cumpliendo las medidas preventivas para la adaptación de la actividad de la Banda Sinfónica Municipal contra la COVID-19. “Su falta de capacidad o de dignidad política pone en riesgo a los profesores de la Banda Sinfónica Municipal”, asegura.
El protocolo de Madrid Salud establece turnos o rotaciones en los ensayos presenciales, de modo que se pueda mantener la distancia de seguridad y precisa que ha de haber 2 metros entre cada músico. Sin embargo, tras la vuelta a los escenarios y hasta la tercera ola, “parece que nada se respeta”.
Recuerda la edil que ya en julio del año pasado, CCOO alertaba de que faltaba personal de gestión para colocar atriles y sillas y desinfectar instrumentos; no había pantallas en condiciones, porque las compradas tenían un tamaño ridículo y carecían de medidas de señalización en el espacio de ensayos. Madrid Salud emitió un informe con una serie de medidas correctoras “que a fecha de hoy aún no se han ejecutado”.
“A CCOO le han contestado que el área cuenta con pocos medios y que el número de músicos está adaptado a las necesidades actuales”, indica Espinar, quien considera que esta respuesta prueba que “mienten cada vez que respiran”, ya que “hay fotos que demuestran que no se respeta la distancia; se ha hecho un concierto hace poco con 50 músicos; siguen las pantallas de juguete; el espacio carece de ventilación y continúan sin personal para ordenar y limpiar”.
La concejala ha advertido al Gobierno municipal que “proteger a los músicos es su deber y no lo han hecho”.