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Un anglicismo, Black Friday, se ha incorporado a nuestro lenguaje habitual, a nuestro calendario y a nuestra vida cotidiana. Al igual que tenemos en mente las rebajas de enero y de julio, ya tenemos también nuestro Viernes Negro, para planificar nuestras compras de Navidad y, sobre todo, adquirir aquellas cosas que, normalmente por su precio, requieren un mayor desembolso económico y ahora son una oportunidad.
El Black Friday es sinónimo de descuentos y, por tanto, también de cautela para que ese consumo no nos descabale las cuentas y que las rebajas lo sean de precio, nunca de calidad. Con ese fin el Área de Economía, Innovación y Empleo, a través del Instituto Municipal de Consumo, ha editado una Guía de recomendaciones de cara al Black Friday, que se celebra el próximo viernes, 27 de noviembre.
Su objetivo es velar por la seguridad de los consumidores, fomentando el consumo responsable durante esa jornada de grandes descuentos y que las compras se realicen con todas las garantías, evitando sorpresas.
Es un momento también para recordar los duros momentos por los que atraviesa, a causa de la crisis sanitaria, el comercio de proximidad. De ahí que, el delegado de Economía, Innovación y Empleo, Miguel Ángel Redondo haya pedido a los madrileños que “en lo posible, hagan sus compras en el comercio local, a través de sus plataformas online”.
Ten siempre en cuenta
Recuerda siempre que la promoción deberá ir precedida o acompañada de la suficiente información. Entre ella, los productos objeto de promoción, las condiciones de venta y la vigencia de la oferta que, en el caso de la Comunidad de Madrid no podrá ser inferior a dos días consecutivos, ni superior a 30, salvo en el caso de los perecederos.
En los precios deberá quedar claro cuál era el original y el rebajado y las tiendas que tengas artículos con y sin rebaja, estos deberán estar debidamente separados para que no pueda inducirse a error al comprador.
A la hora de comprar, mira las etiquetas y comprueba que los productos están debidamente etiquetados, obligatoriamente en lengua española, y, sobre todo en el caso de los juguetes, que tienen la debida homologación por parte de la Unión Europea (UE). Los comerciantes están obligados a disponer de hojas de reclamaciones para todos los ciudadanos que las soliciten.
Si realizas las compras por Internet, extrema la precaución a la hora de introducir tus datos personales en la red. Además de las precauciones, los consejos para conseguir un consumo responsable: comprar lo que necesitas y te puedas permitir, evitando dejarte llevar por los impulsos; controlar los gastos –‘¿cuánto puedo realmente gastar?’ – y no comprar productos falsificados.
Y un último consejo, guarda los folletos publicitarios ya que en el Black Friday los consumidores pueden exigir el cumplimiento de lo anunciado en todos sus términos, puesto que la publicidad es vinculante; es decir, la empresa debe cumplir el contenido de la misma, al ser parte del contrato, y entregar exactamente lo ofertado.
Además de esta guía, los inspectores del Instituto Municipal de Consumo visitarán aleatoriamente establecimientos que anuncien promociones durante esta jornada de grandes descuentos para garantizar que los derechos de los consumidores se cumplen.
Desde el Ayuntamiento te ayudan
Ante cualquier problema o reclamación no atendida, los madrileños disponen de la Oficina Municipal de Información al Consumidor, con 22 sedes: la central situada en Príncipe de Vergara, 140 y el resto distribuidas por los distritos de la ciudad.
Allí pueden presentar una denuncia o reclamación sin asesoramiento previo de cuatro formas: telemáticamente, si se dispone de firma electrónica, a través del Registro Electrónico, disponible en Trámitar en línea; presencialmente, en las oficinas de registro municipales, así como en los registros de otras Administraciones Públicas; por correo postal con un escrito firmado dirigido a la OMIC Central (Calle Príncipe de Vergara, 140, 28002 Madrid), y por correo electrónico.
Si quieres información personalizada debes solicitar cita previa a través de Línea Madrid, seleccionando ‘Consumo’ como el servicio deseado o llamando al teléfono 010 0 al 91.529.82.10.
¿Por qué un Viernes Negro?
El Black Friday tiene su origen en la década de los sesenta del pasado siglo en Filadelfia, EEUU, en alusión a los embotellamientos de personas y tráfico rodado que originaba el inicio de la temporada de compras navideñas, que en el país norteamericano comienza justo después del Día de Acción de Gracias, la jornada siguiente al cuarto jueves de noviembre.
El término empezó a popularizarse y, ya a mitad de la siguiente década, formaba parte del calendario de compras de todo el país. No sólo eso, sino que paulatinamente se fue exportando y arraigando en muchos más países.
Hay quien dice que el nombre no se debe solo a esa jornada negra para el tráfico que supone en Black Friday, sino al hecho de que muchos comercios pasaran de tener números rojos a números negros, es decir, de saldo negativo a positivo, gracias al importante empujón de ventas de esa jornada. Ten, por tanto, en cuenta la guía municipal recién editada para que tus cuentas no pasen al rojo y sigan en negro.
Enlace >> Guía Black Friday. Ayuntamiento de Madrid
