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La Junta de Gobierno ha prorrogado este jueves el contrato para la prestación del servicio de comida a domicilio del Ayuntamiento de Madrid, adjudicando a Unión Castellana de Alimentación S.A. la supervisión y la entrega en los domicilios de las personas mayores usuarias de platos preparados en forma de comidas listas para calentar.
Planteado como un recurso municipal de carácter preventivo, el Ayuntamiento de Madrid ha apostado por su continuidad con una modificación del 6,95% respecto al precio del anterior contrato para atender este incremento de demanda motivado por la crisis de la COVID-19, tal y como ha explicado la portavoz municipal, Inmaculada Sanz, en rueda de prensa.
El delegado del Área de Familias, Igualdad y Bienestar Social, Pepe Aniorte, ha informado a la Junta de Gobierno del aumento del 12 % del número de usuarios del servicio de comida a domicilio para personas mayores respecto a los que la recibieron en todo 2019. A causa de ese incremento, este servicio del Ayuntamiento de Madrid ha atendido desde enero hasta octubre de este año a 4.069 personas mayores frente a las 3.643 que recibieron las comidas el año pasado, lo que equivale a 540.693 comidas servidas frente a las 515.350 de 2019.
Durante la pandemia provocada por la COVID-19, el Ayuntamiento ha volcado su atención en garantizar las ayudas de alimentación a domicilio para personas mayores y para 500 menores de las escuelas infantiles municipales. Además, el Consistorio se ha centrado en la atención a familias vulnerables desde los centros de servicios sociales que, desde el inicio de la pandemia, han multiplicado por cuatro las ayudas alimentarias respecto a 2019. Solo en lo que va de 2020, se ha prestado ayuda para necesidades básicas a alrededor de 255.000 personas.
