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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha ofrecido esta semana a las comunidades autónomas la posibilidad de solicitar el apoyo de 2.000 militares de la Unidad Militar de Emergencias (UME) formados en técnicas de rastreo de contactos de contagiados por coronavirus.
Diferentes ejecutivos regionales han recogido el guante sobre este ofrecimiento y han mostrado cierta disponibilidad para, en caso de precisarlo, utilizar a estos expertos militares. Uno de estos ejecutivos es el de la Comunidad de Madrid, que ha solicitado al Gobierno central información sobre estos rastreadores para conocer cuál es su formación y si podrían «encajar» en el sistema de rastreo de la sanidad madrileña.
El consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Enrique Ruiz Escudero, ha incidido en que cualquier ofrecimiento en esta materia por parte del Gobierno de España «siempre es bienvenido», pero ha precisado que existen difrerencias entre los miembros del sistema de rastreo regional: los encargados de realizar las encuestas epidemiológicas, los encargados de hacer seguimiento telefónico y los técnicos de salud pública que hacen seguimiento del historial de cada paciente, siendo estos últimos licenciados y diplomados.
Formación de los rastreadores de la UME
El Ministerio de Defensa creó un Sistema de Rastreo para la detección precoz y vigilancia epidemiológica, así como capacitación a personal militar como rastreadores, para garantizar una capacidad y control suficientes con los que detectar el incremento de la transmisión del COVID-19 entre el personal de las Fuerzas Armadas.
Para ello se puso en marcha un curso de rastreadores online, tomando como referencia el del Centro Internacional John Hopkins, adaptado a las necesidades y a la disponibilidad del personal de las Fuerzas Armadas y las propias condiciones de su puesto de trabajo.
El citado curso de rastreadores se compone de 5 módulos de formación en los que se da información sobre aspectos básicos de la enfermedad del COVID-19, cuyo objetivo principal es dotar al personal que lo realice de los conocimientos necesarios para poder efectuar un seguimiento eficaz de los contactos, obtener la información necesaria para discriminar los posibles casos, calcular el tiempo de cuarentena en función de los datos obtenidos y dar apoyo a las personas afectadas.
Además, los rastreadores profundizan en el conocimiento del virus y la enfermedad, cuadros clínicos, períodos de incubación e infectivo, factores de riesgo, mecanismos de trasmisión, medidas de prevención, procedimiento para el rastreo de contactos y principios de actuación entre otros aspectos, todo ello teniendo en cuenta los aspectos relacionados con la protección de datos y principios de la comunicación para conseguir un intercambio de información eficaz.
Desde el Ministerio de Defensa se ha incidido en que “no todos los militares pueden ser rastreadores” y en la importancia del proceso de selección, “porque significa elegir al personal más apropiado y cualificado para esta tarea”.
‘Radar Covid’
Por otro lado, el presidente del Gobierno de España ha ofrecido la posibilidad de la detección digital gracias a la aplicación ‘Radar Covid’, que, a través la información que obtiene en el rastreo de contactos, permite conocer el nivel de riesgo de contagio y avisar a los interesados.
Siete comunidades autónomas ya han completado el proceso técnico y tienen este sistema plenamente operativo: Andalucía, Aragón, Cantabria, Extremadura, Canarias, Castilla y León y Baleares. «Exhortamos a todas las demás comunidades, que aún no lo han hecho, para que se incorporen al sistema de rastreo digital», ha dicho Sánchez, que también ha animado a la ciudadanía a descargarse la aplicación.
Desde la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ya han mantenido conversaciones con el Ministerio de Sanidad con el fin de emplear dicha herramienta, aunque la intención del Ejecutivo regional es integrar o adaptar ‘Radar Covid’ a la app regional ‘Corona Madrid’, con el fin de que los usuarios madrileños no tengan que usar ambos sistemas.
