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El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, inauguró el jueves de la semana pasada la peatonalización de la Puerta del Sol y de sus alrededores, con la que pasaba a convertirse en zona cero emisiones, dentro del plan de actuaciones ‘Madrid 360’.
Tras varias denuncias públicas y comunicados sobre la presunta supresión del carril bici de dicha plaza ya peatonal, finalmente desde el Consistorio madrileño se aclaró la conservación de la funcionalidad ciclista que había hasta ahora.
Tras ello, desde la Asociación Pedalibre han reclamado que el proyecto de reforma definitivo debe incluir mejoras en el eje Mayor-Alcalá, del que forma parte, con el fin de «ir avanzando en el desarrollo de la red ciclista y hacer más fácil y práctico moverse en bicicleta».
La propuesta de dicha asociación ciclista radica en dotar de doble sentido ciclista a diversas vías:
- La calle Alcalá entre la Puerta del Sol y Cedaceros, a través de un carril bici exclusivo que conecte con el existente en esta calle, de manera que «las bicicletas puedan emplearlo para ir de Sol a Cibeles, evitando el rodeo que supone el actual itinerario por carrera de San Jerónimo».
- La carrera de San Jerónimo, en el tramo comprendido entre la calle Cedaceros y Sol, y así preparar su posterior conexión con El Retiro a través de un carril bici que lleve hasta la puerta de Felipe IV.
- La calle Cedaceros que permita la conexión directa de Alcalá con el entorno de Huertas por la calle Ventura de la Vega y Príncipe.
De este modo, desde Pedalibre argumentan que se dispondría de una bifurcación del eje este-oeste, que «mejora la accesibilidad ciclista desde el propio parque de El Retiro, el entorno de Atocha y el próximo carril bici del eje Prado-Recoletos-Castellana, comprometido desde noviembre y objeto de especial impulso desde la firma de los Acuerdos de la Villa».