El Pleno del Ayuntamiento de Madrid celebrado este martes, 26 de noviembre, ha aprobado por unanimidad de todos los grupos la propuesta de la Alcaldía para conceder el título de hijo adoptivo de Madrid a Benito Pérez Galdós, previa ampliación del número de personas a las que se puede conceder este título, de conformidad con lo dispuesto en el artículo 6 del vigente Reglamento para la Concesión de Distinciones Honoríficas.

Tras la aprobación previa, también por unanimidad de todos los grupos en la Comisión de Cultura, Turismo y Deporte, la delegada del Área, Andrea Levy, ha explicado que con Galdós se dan “las excepcionales circunstancias que permiten la ampliación del número máximo de personas a las que puede concederse el título de hijo adoptivo de Madrid”.

Levy ha recordado que el autor nació en Las Palmas de Gran Canaria, pero residió durante casi seis décadas en Madrid, “de cuyas calles y plazas se enamoró tan profundamente que las convirtió en un personaje literario más. Galdós simboliza cómo esta ciudad acoge al que llega, haciéndole, haciéndonos, un madrileño más”.

La iniciativa fue presentada en el registro del Ayuntamiento por Eduardo Javier Valero, vicepresidente de la Asociación Cultural Verdeviento, en nombre de centenares de ciudadanos anónimos y en representación de decenas de asociaciones, entre ellas la Asociación Internacional de Galdosistas con sede en Indianápolis.

Centenario de Galdós

Desde el Área de Cultura, Turismo y Deporte, ha explicado Andrea Levy, se está ultimando la programación para celebrar en 2020 el centenario del fallecimiento del autor. Será un año lleno de actividades que se están elaborando con la colaboración de los conocedores y admiradores de Galdós.

Tras la obtención de este título y el cambio de nombre de la biblioteca municipal de Conde Duque, que pasa a denominarse Benito Pérez Galdós, el tercer homenaje será el próximo 4 de enero de 2020, fecha en la que se cumple el centenario de su fallecimiento en Madrid.

“Por lo que la concesión de esta distinción en este momento ya no es solo necesaria y obligada, sino también especialmente oportuna”, ha defendido Andrea Levy.