Los madrileños consumirán más de 345.000 kilos de dulces tradicionales de Todos los Santos como son los buñuelos, huesitos de santo, empiñonados y almendrados.
Este viernes es 1 de noviembre, festividad de Todos los Santos, y los madrileños lo celebran con la más dulce tradición, regalando los deliciosos buñuelos de viento y los exquisitos huesos de santo, entre otros.
Las cerca de 600 pastelerías de la Comunidad de Madrid venderán este año más de 345.000 kilos de dulces tradicionales de estas fechas (buñuelos, huesos de santo, empiñonados y almendrados), según datos estimativos de la Asociación de Empresarios Artesanos del sector de la Pastelería de Madrid (Asempas).
Los buñuelos de viento son los dulces más demandados por los madrileños, que consumirán alrededor de 265.000 kilos. Las pastelerías venderán unos 66.300 kilos de huesos de santo y cerca de 6.900 kilos de empiñonados y almendrados y 6.900 kilos de productos de Hallowenn.
Desde el propio Gobierno de la Comunidad de Madrid han puesto de manifiesto «el alto nivel de las pastelerías de la región, que mantienen el sabor tradicional de los productos al mismo tiempo que se han adaptado a los nuevos tiempos invirtiendo e innovando de cara a ofrecer el mejor producto y servicio, así como la atención más exquisita a sus clientes”.
Un dulce que se remonta a la edad media
Los buñuelos, el producto estrella de la Festividad de Todos los Santos, se empezaron a consumir en palacios y conventos durante la Edad Media, y de ahí pasaron a elaborarse en casas particulares. Finalmente, y a día de hoy, son los obradores de las pastelerías los que se han especializado en la elaboración de estos dulces tan típicos.
Los huesos de santo, empiñonados y almendrados tienen un claro origen árabe como todos los dulces elaborados a base de almendra, miel y azúcar. Además, sigue el aumento de consumo en productos de Halloween, una tradición británica cada vez más extendida en todo el mundo.
1 comment
Aunque parezca mucho dulce para un par de días, son sólo unos 60 gramos por madrileño, mucho más sano que los 100 gramos de un par de donuts.