La Junta de Gobierno celebrada hoy jueves, 11 de abril, ha aprobado inicialmente el protocolo de actuación ante la previsión de situaciones meteorológicas excepcionalmente adversas y de gestión de incidencias causadas por el arbolado en los Jardines del Buen Retiro. Se abre ahora un periodo de información pública de un mes para la presentación de alegaciones.

El objetivo de este protocolo es prevenir incidencias y evitar posibles riesgos a la ciudadanía, tanto por circunstancias biológicas del arbolado como por condiciones meteorológicas adversas que puedan dañar o fracturar árboles o ramas de alguno de los más de 17.000 árboles, muchos de ellos de grandes dimensiones y en algunos casos de avanzada edad, con los que cuenta este pulmón verde de la ciudad de casi 120 hectáreas de superficie.

El texto que se aprueba hoy supone una importante revisión del protocolo de actuación que viene aplicándose desde 2016 y que está incorporado en el Plan Director del Arbolado de los Jardines del Buen Retiro. Se han modificado los distintos umbrales de alerta por viento, estableciendo las correspondientes medidas de prevención en cada caso.

El nuevo protocolo persigue garantizar la seguridad en el parque -mediante una intervención directa en los casos en que sea necesario-, preparar la posible intervención y coordinación de los cuerpos o equipos que presten la ayuda exterior cuando sean requeridos, así como garantizar la rapidez y eficacia en las acciones que se emprendan para controlar las incidencias.

Niveles de alerta

Se establecen cuatro niveles de alerta (verde, amarillo, naranja y rojo) en función de las previsiones facilitadas por la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para las variables meteorológicas consideradas en el protocolo: intensidad de nevadas y velocidad de rachas de viento. En el caso de los valores de vientos se tiene en cuenta la previsión de temperatura máxima, (mayor o menor de 35ᵒ) que afecta a la probabilidad de caída de ramas, y por la humedad del suelo (un porcentaje de agua mayor o menor del 75 % a una profundidad de 170 centímetros), que afecta a la probabilidad de caída de árboles.

Nivel Verde: Cuando los factores meteorológicos no superan el umbral mínimo: rachas de viento máximas de 40 km/h, con una temperatura máxima prevista inferior a 35ᵒ y un porcentaje de agua disponible en el suelo, a una profundidad de 170 centímetros, menor del 75 %, o rachas de viento menores de 30 km/h con temperaturas superiores a 35ᵒ y un porcentaje de humedad por encima del 75 %.

En el caso de nieve, el nivel verde corresponde a un espesor de nieve acumulada en 24 horas menor a dos centímetros.

Nivel Amarillo: Rachas de viento entre 40 y 50 km/h con temperaturas por debajo de 35ᵒ y un porcentaje de agua menor del 75 % , y para rachas de viento entre 30 y 40 km/h con temperaturas superiores a 35ᵒ y más del 75 % de humedad del suelo.

También se alcanzará el nivel amarillo con acumulaciones de nieve durante 24 horas de entre dos y cinco centímetros.

Con nivel amarillo se restringe el acceso a los Jardines de Cecilio Rodríguez y a las áreas de juegos infantiles, de mayores y deportivas.

Nivel Naranja: Rachas de viento de entre 50 y 65 km/h con temperaturas inferiores a 35ᵒ y menos de un 75 % de humedad del suelo, y rachas de viento de entre 40 y 55 km/h para temperaturas superiores a 35ᵒ y humedad del suelo por encima del 75 %.

La acumulación de nieve de entre 5 y 20 centímetros en 24 horas activará el nivel naranja.

En este caso, además de restringir el acceso a los Jardines de Cecilio Rodríguez y a las áreas de juegos infantiles, de mayores y deportivas, se suspenden los eventos al aire libre.

Nivel Rojo: Rachas de viento iguales o superiores a 65 km/h con temperaturas máximas inferiores a 35ᵒ y un porcentaje de humedad del suelo por debajo del 75%, o cuando las rachas de viento sean iguales o superiores a 55 km/h, la temperatura máxima supere los 35ᵒ y la humedad del suelo esté por encima del 75 %.

Cuando en 24 horas la acumulación de nieve sea igual o superior a 20 centímetros se llegará al nivel de alerta rojo.

En el caso de alcanzarse el nivel de alerta rojo se suspenderán todas las actividades y se procederá a desalojar el parque.

La directora-conservadora de los Jardines del Buen Retiro será la responsable del Protocolo, Policía Municipal será la responsable del operativo de desalojo y cierre de los Jardines y, en caso de que sea necesario, se solicitará ayuda externa de SAMUR, Protección Civil o Bomberos.

El Protocolo contará con tres fases: la de normalidad; la de intervención, cuando las predicciones meteorológicas superen los umbrales mínimos contemplados en el protocolo; y la de vuelta a la normalidad, consecutiva a la de intervención.

En esta última fase, que se prolongará hasta el restablecimiento de las condiciones de normalidad en las zonas afectadas, se realizará una inspección de las incidencias producidas durante la alerta y se procederá a la retirada de ramas y árboles caídos, se eliminarán aquellos que se consideren inestables y se repararán los daños más relevantes en el resto de elementos del parque.

Protocolo de gestión de incidencias

Se establece un protocolo de gestión de incidencias que se pondrá en marcha siempre que se produzca una caída de árboles o ramas aunque no se encuentre activado ningún nivel de alerta.

Con este protocolo se persigue corregir la incidencia en el menor tiempo posible de manera eficiente y eficaz con la organización de medios humanos y materiales. Además, se recopilarán todos los datos de la incidencia para el control y seguimiento del arbolado.

Información y presupuesto

Los usuarios del parque estarán informados a través de pantallas, cartelería y megafonía. El resto de ciudadanos tendrán información sobre las diferentes alertas que se puedan declarar mediante la web municipal www.madrid.es, medios de comunicación y redes sociales.

El Protocolo cuenta con una dotación presupuestaria estimada de 4.725.000 euros (1.771.875,00 euros al año) para la ejecución de las medidas previstas durante el periodo 2019 -2021.

Este importe se destinará al aumento de vigilantes de seguridad, que pasarán de 2 a 7 en el horario de apertura del parque; a la creación, dotación y gestión de una centralita de comunicaciones, que estará activa durante el horario de apertura del parque, y a la incorporación de dos oficiales jardineros especialistas en arboricultura para tardes, fin de semana y festivos.

Los gastos derivados de la implantación de medios técnicos previstos en el Protocolo (sistema de megafonía, pantallas informativas y sistema de balizas) correrán a cargo del presupuesto de conservación del parque.