- Yolanda González Martín fue asesinada por los miembros de Fuerza Nueva, organización de extrema derecha, Emilio Hellín Moro e Ignacio Abad Velázquez, que contaron con la colaboración de varias personas más.
- A principios de 2016 se aprobó, a propuesta del PSOE, colocar una placa explicativa de quién fue Yolanda González y una breve descripción de sus acciones más destacadas, que finalmente ha sido colocada este domingo.
Este domingo, 18 de noviembre, la Junta Municipal del distrito de Latina, con la colaboración de antiguos compañeros de militancia de Yolanda González en el Partido Socialista de los Trabajadores, han llevado a cabo un acto en recuerdo a Yolanda González, líder estudiantil y vecina del distrito de Latina asesinada por un comando fascista el 1 de febrero de 1980.
A las 11:30 horas se ha celebrado en la Biblioteca Ángel González una mesa redonda que ha recordado la figura de Yolanda González y la época en la que fue asesinada. Han participado su hermano, sus compañeros del Partido Socialista de los Trabajadores y Carlos Fonseca, autor de ‘No te olvides de mí’, el libro que reconstruye el secuestro y asesinato de la joven bilbaína a manos de un comando de ultraderecha.
Fonseca apuntó también al controvertido proceso judicial de “uno de los últimos crímenes del franquismo en plena transición”. “Era una mujer libre”, ha evocado también Mar Noguerol, compañera de piso de Yolanda, “formaba parte de una generación a la que querían acallar”.
Posteriormente, se ha llevado a cabo el acto central de homenaje en los jardines de la calle Escalona que se llevan su nombre, donde se ha colocado una placa explicativa de quién fue Yolanda González y una breve descripción de sus acciones más destacadas. La música también ha estado presente en el homenaje: “Cantamos por el niño y porque todo y porque algún futuro y porque el pueblo, cantamos porque los sobrevivientes y nuestros muertos quieren que cantemos”, ha entonado el equipo de la orquesta La Solfónica, evocando el poema de Mario Benedetti.
El concejal-presidente de Latina, Carlos Sánchez Mato, ha destacado que esta placa se ha colocado «en recuerdo a su militancia, activismo y lucha para construir una sociedad más justa. 38 años después de su vil asesinato por fascistas, su memoria sigue viva».
Por su lado, Asier González, hermano de la homenajeada y venido desde Bilbao para la ocasión, ha destacado que «Yolanda se enamoró de la ciudad de Madrid, y en ella encontró la continuación de su lucha política y estudiantil». Asier González ha mostrado tanto su agradecimiento como el de la familia a los vecinos de Latina, a los compañeros de Yolanda y a las instituciones por haber llevado a cabo este homenaje.
Al acto han asistido representantes del PSOE, partido proponente de este homenaje, como el concejal municipal Pedro Barrero, representantes de Ciudadanos y del Partido Popular, a pesar de que este último votó en contra de la colocación de la placa en el Pleno de la Junta de Latina. El evento ha finalizado con el ‘Canto a la Libertad’ y el canto «se nota, se siente, Yolanda está presente» de los asistentes al homenaje.
“Fue una líder estudiantil, trabajadora y militante del Partido Socialista de los Trabajadores. Luchó por la democracia real, la justicia y los derechos sociales y laborales. En febrero de 1980 fue secuestrada en su casa, en Aluche, y asesinada por un comando fascista. Tenía 19 años. Estos jardines están dedicados a su recuerdo, que sigue vivo”. Así reza el texto de la placa descubierta.
Yolanda González Martín nació en 1961 en el barrio bilbaíno de Deusto, en el seno de una familia obrera originaria de Burgos. A los 16 años se afilió a las Juventudes Socialistas de España dentro de la corriente Izquierda Socialista, para evolucionar posteriormente hacia el trotskismo.
En 1979 se trasladó a Madrid para iniciar estudios de electrónica. En 1980 era la representante del Centro de Formación Profesional de Vallecas en la Coordinadora de Estudiantes de Enseñanza Media de Madrid. También era militante del Partido Socialista de los Trabajadores (PST), un pequeño grupo político trotskista que no era aún legal, que provenía de una escisión de la Liga Comunista Revolucionaria.
Compaginaba sus tareas formativas, militancia política y estudiantil con eventuales trabajos como empleada del hogar para tener autonomía financiera respecto a su familia, cuya economía era limitada.
Yolanda González Martín fue secuestrada a última hora de la tarde del 1 de febrero de 1980 en su domicilio, Calle Tembleque 101 (Barrio de Aluche), de Madrid, cuando se hallaba sola (convivía en un piso de estudiantes, un modesto apartamento de 60 metros cuadrados —cocina, un pequeño salón y tres dormitorios—, con su novio Alejandro Arizcun y con otra compañera del PST, Mar Noguerol), y al que los secuestradores accedieron engañando a Yolanda, mostrando identificaciones falsificadas de autoridades policiales.
Al regresar su novio a la vivienda a medianoche encontró todo ordenado y las luces encendidas, pero no estaba ni Yolanda ni la otra compañera de piso. Pensó que estaría en alguna reunión tardía por sus actividades en la coordinadora estudiantil, por lo que no dio mayor importancia.
Al despertarse en la mañana del día 2 de febrero notó que el bolso, cartera y DNI de Yolanda estaban en la mesa del salón y, preocupado por si hubiera sido detenida, hizo varias gestiones telefónicas en instancias policiales y judiciales de Madrid para averiguar su paradero, sin resultado.
En la misma mañana al regresar la compañera de piso y de partido, con dos amigos, se encontró en el piso con policías de paisano registrándo la vivienda. Fueron llevados a la Dirección General de Seguridad donde fueron interrogados sobre sus actividades políticas y su posible relación con ETA. El novio, por la tarde, al acudir a la sede del partido le informaron sobre el fatal destino de Yolanda. Parece ser que los secuestradores se presentaron el día 1 por la mañana en la vivienda y al no encontrar a nadie, decidieron volver por la tarde-noche.
Yolanda González Martín fue asesinada por los miembros de Fuerza Nueva Emilio Hellín Moro e Ignacio Abad Velázquez, que contaron con la colaboración de varios sujetos más (José Ricardo Prieto, Félix Pérez Ajero, Juan Carlos Rodas Crespo y David Martínez).
Juan Carlos Rodas Crespo, agente de la Policía Nacional (anteriormente Policía Armada), participó en la vigilancia del exterior de la vivienda junto a otros cómplices, mientras Emilio Hellín Moro e Ignacio Abad Velázquez subían para secuestrarla. Al día siguiente, al enterarse por la prensa de su muerte, Juan Carlos Rodas Crespo, sorprendido y arrepentido por el resultado final de lo que creía era un simple interrogatorio, denunció los hechos ante sus superiores policiales de Getafe lo que aceleró las investigaciones y la resolución del caso.3
En el momento del hallazgo del cadáver, Yolanda vestía debajo de su jersey una camiseta blanca con el escudo de las siete provincias vascas y una medalla con el lauburu, lo que llevó a la policía a determinar que el crimen tenía connotaciones políticas.
Los autores de su asesinato intentaron justificarlo como venganza por el Atentado de Ispáster perpetrado por ETA a primera hora de la mañana del 1 de febrero de 1980, en el que murieron de seis guardias civiles, ya que la acusaban de pertenecer a un supuesto comando de ETA en Madrid. Sin embargo el PST al que pertenecía Yolanda González Martín no sólo no formaba parte de la izquierda abertzale sino que rechazaba explícitamente la violencia de ETA.
Gacetin Madrid, diario digital líder en la ciudad de Madrid y sus 21 distritos, ofrece a sus lectores el poder acceder a las principales noticias del día a través del servicio gratuito de alertas por WhatsApp.
Para ello solo hay que pinchar desde el teléfono móvil o tablet en este enlace y guardar el número 644253102 en la agenda. Enlace >> http://goo.gl/E8GUWG