Han pasado ya más de 17 horas desde que cayera el forjado de la séptima planta de un edificio en obras del número 19 del Paseo del General Martínez Campos, en el madrileño distrito de Chamberí, arrastrando todo a su paso hasta la segunda.
Un obrero que se encontraba en la séptima logró salir con tan solo una fractura de codo. Sin embargo, dos obreros de 42 y 56 años que estaban en la quinta aún siguen desaparecidos y 50 bomberos del Ayuntamiento de Madrid se afanan en buscarlos retirando escombros y restos del forjado a mano, ya que la zona es inestable.
Se apoyan en perros de rastreo de la Policía Nacional, de la Policía Municipal de Madrid y de la Unidad Canina de Rescate (UCR), además de emplear pequeñas palas y tecnología como detectores de sonido, cámaras y micrófonos.
También en la zona superior del edificio se llevan a cabo pequeñas demoliciones controladas para acabar con los elementos inestables y así facilitar los trabajos de búsqueda.
Desde Emergencias Madrid explican que estas tareas son muy complicadas ante el importante riesgo de más derrumbes y caída de cascotes y restos del forjado. Por ello, fuera del edificio, en la calle que sigue cortada al tráfico se encuentra un dispositivo del SAMUR y SUMMA 112 con un hospital de campaña preparado por lo que pudiera suceder.
Además, psicólogos del SAMUR llevan toda la noche atendiendo a los familiares de los obreros desaparecidos, que se encuentran en una situación de angustia. Las 10 familias de los edificios colindantes que fueron desalojadas ayer tras lo sucedido aún no han podido regresar a sus casas.