Los representantes de UGT, CCOO y del Ayuntamiento de Madrid han votado en contra de los presupuestos del Consorcio Regional de Transporte de Madrid para 2018, presentados a su Consejo, «al incumplir la Comunidad los acuerdos adoptados con anterioridad y al reducir la contratación y la renovación de la flota en la EMT».
Los presupuestos del transporte público para 2018 se verán incrementados por encima del 4,5%, como consecuencia del previsto aumento de la demanda, en torno al 1,8%, pero «es insuficiente tras los muchos años en los que los recortes han mermado las plantillas y los medios técnicos».
Como elemento positivo se valora «la congelación de los precios del transporte, coherente con la parálisis del crecimiento salarial en la Región o de las pensiones públicas, así como se valora de forma positiva la creación del Abono Joven cuando se propuso en el Consejo de Administración».
Las razones que han motivado el voto en contra del representante de CCOO, coincidente con los votos del representante de UGT y de los representantes del Ayuntamiento de Madrid, parte de la representación del resto de municipios madrileños, se resume en tres puntos:
En primer lugar porque de nuevo, como viene ocurriendo desde el inicio de la crisis, se ha desechado la propuesta sindical para la creación del Abono Social del Transporte, una de las principales iniciativas de carácter social en la Comunidad de Madrid que CCOO viene reclamando reiteradamente y de la que ni siquiera se ha establecido un razonable debate en el seno del Consejo del Consorcio Regional.
En segundo lugar, porque no se han cumplido los compromisos para la constitución de un foro de estudio y debate acerca de la financiación de los distintos medios de transporte y los mecanismos de compensación, tarifas de equilibrio y otros conceptos que, sin ser analizados y puestos en común adecuadamente, impiden la labor representativa de los miembros del Consejo que no forman parte de la Administración ante la falta de herramientas que nos permitan arrojar mucha más luz sobre los criterios de financiación.
Por último CCOO se ha cansado de reiterar que los operadores públicos, sobre todo la EMT, venían endeudándose fuertemente debido a las partidas destinadas a la renovación y reparación de su material móvil y por la escasa dotación por parte del CRTM para estos fines que ha llevado a la EMT de Madrid a una situación de fuerte deterioro de su flota, lo que viene siendo reiteradamente denunciada por la Sección Sindical de CCOO en la EMT. En torno al 68% de la flota tiene una antigüedad superior a los diez años y desde 2011 no se ha incorporado personal de talleres pese a que se había anunciado la contratación.