Todas las mañanas, casi de madrugada, las y los inspectores de Madrid Salud controlan los productos alimenticios que entran en Mercamadrid para distribuirse, desde allí, a comercios, comedores y establecimientos hosteleros de la ciudad y de otras localidades ubicadas en un radio de influencia de 500 kilómetros.
Hoy les han acompañado en su tarea el delegado del Área de Salud, Seguridad y Emergencias, Javier Barbero, y el gerente de Madrid Salud, Antonio Prieto. Barbero ha conocido de primera mano el trabajo de los doce funcionarios municipales que supervisan el funcionamiento de los establecimientos que operan en Mercamadrid (600 empresas instaladas), controlan los alimentos (higiene, almacenamiento, envasado, etiquetas, temperatura) y toman muestras para analizar sus condiciones físicas, biológicas, químicas o de composición, a fin de proteger a los y las consumidores finales y evitar cualquier riesgo sanitario.
Los inspectores municipales han recibido al delegado en las oficinas que tiene Madrid Salud en el gran mercado y han recorrido con él los puestos de frutas y de pescado.