Según informa El Mundo, a partir del año que viene el horario del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) de Madrid se ampliará por la noche y los fines de semana y festivos en las zonas de la ciudad con «especiales características de demanda de transporte privado». La medida se incluye en el Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático elaborado por el Ayuntamiento de la capital, que tiene por objetivo reducir el 50% de las emisiones causadas por la movilidad urbana en el horizonte 2030.
Con la extensión del sistema de pago por aparcar en la calle el Gobierno de Manuela Carmena pretende amplificar el ‘efecto disuasorio’ para que los conductores dejen el coche en casa al hacer desplazamientos por la almendra central. Según una portavoz municipal, la iniciativa se encuentra en fase de «estudio» y de momento no se han concretado los lugares en los que los parquímetros permanecerán más tiempo en funcionamiento.
La posibilidad de ampliar el SER hasta la medianoche y más allá del sábado a las 15.00 horas la adelantó en un curso en la Universidad Menéndez Pelayo el pasado mes de agosto Elisa Barahona, directora general de Sostenibilidad y Planificación de la Movilidad durante el mandato de la popular Ana Botella y en aquel momento consejera técnica del Área de Medio Ambiente y Movilidad, que desde junio de 2015 dirige Inés Sabanés. Sin embargo, la concejal responsable del departamento se apresuró a negar que se estuviera contemplando esta medida, aseguró que no estaba incluida en el borrador del Plan de Calidad del Aire que se estaba redactando ya entonces y la redujo a la categoría de «reflexiones en un ámbito académico».
El Consistorio de Ahora Madrid ha cambiado de idea y finalmente sí extenderá el horario de prestación del SER a partir de las 21.00 horas de lunes a viernes y durante los fines de semana y festivos, aunque no con carácter generalizado. A esta medida se suma la prohibición de que los vehículos de gasolina anteriores a 2000 y los diésel matriculado antes de 2006 puedan aparcar en los barrios con parquímetros, que entrará en vigor a partir de 2020.
Pero no son las únicas medidas vinculadas al aparcamiento en superficie que se irán implantando gradualmente. También a partir de 2018 se van a establecer zonas o plazas específicas con periodos de estacionamiento más reducidos para restringir el tiempo que pasan en ellos los vehículos que no son de vecinos. En la actualidad es posible permanecer en un mismo barrio hasta un máximo de cuatro horas seguidas dentro de las líneas azules y de dos en las verdes -salvo para los empadronados con tarjeta de residente, que pueden hacerlo sin límite horario-.
Otra de las acciones previstas para reducir la contaminación es la aplicación de nuevas tarifas en los parquímetros para avanzar en la penalización a los vehículos más contaminantes y la bonificación a los más limpios. Así, este año se reducirá un 50% el precio del tique a los coches con distintivo eco y se incrementará en un 25% para los modelos más antiguos.
Asimismo, en los próximos meses se crearán más zonas de larga estancia, identificadas con líneas azules y naranjas, en las que cualquier usuario puede estacionar un máximo de 12 horas al día. Éstas se ubicarán en lugares de baja ocupación o próximos a intercambiadores o estaciones de transporte público en las zonas más exteriores del SER.
Entre los cambios impulsados por el equipo de Carmena, destaca también el incremento progresivo de los espacios reservados a residentes dentro de los aparcamientos de concesión municipal en detrimento de la oferta de rotación. Esta iniciativa se dejará notar ya en la reforma del parking de Plaza de España, donde se reservarán dos de sus tres plantas para vecinos.
Finalmente, el Ayuntamiento de Madrid está planteándose la opción de crear un SER alternativo en localizaciones externas a la M-30 que sufren el efecto frontera de la zona de pago. La primera prueba piloto se hará en el segundo semestre de este año en el barrio de Begoña.
Fuente de la noticia: El Mundo