En el Real Jardín Botánico de Madrid se han iniciado las obras de restauración, recuperación y conservación de una parte del ajardinamiento y cerramiento histórico del siglo XVIII en el tramo comprendido entre la Plaza de Murillo, donde se ubica la entrada de visitantes del Jardín, y la Puerta del Rey, en el Paseo del Prado, donde se procederá también a recuperar el recorrido peatonal de esta zona, devolviendo a esta fachada del Botánico su proporción y su función estancial original.
El director del Real Jardín Botánico-CSIC, Jesús Muñoz, destaca “la necesidad de acometer esta obra no solo por el importante deterioro de la verja, un elemento histórico del Jardín Botánico de incalculable valor, sino también porque supondrá un atractivo más en el Paseo del Prado que justifica el por qué este área de Madrid se ha incluido en la ‘Lista indicativa’ de Patrimonio Mundial de la UNESCO”.
Además de restaurar la verja de hierro dulce, construida e instalada entre 1781 y 1789 y muy deteriorada por el paso del tiempo y los efectos de los bombardeos de la Guerra Civil, y eliminar los ajardinamientos exteriores, cuyas aportaciones de agua también han dañado el cerramiento, “se procederá a recuperar una bancada de granito diseñada y ejecutada por el arquitecto real Francisco Sabatini que se inicia a ambos lados de la Puerta del Rey y termina, por un lado, en la Cuesta Moyano, y, por otro, en la Plaza de Murillo. Esta bancada, Bien de Interés Cultural, dará también un mejor aspecto al Paseo”, señala Jesús Muñoz.
La obra de restauración del cerramiento histórico, que está previsto concluya a finales de año, está cofinanciada en un 75% con el 1,5% Cultural de los ministerios de Fomento y Educación, Cultura y Deporte, y con un 25% por el Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), organismo al que pertenece el Real Jardín Botánico. Para la ejecución de la obra, el CSIC y el Ayuntamiento de Madrid han suscrito un convenio de colaboración para la recuperación del recorrido peatonal del Paseo del Prado en el tramo que transcurre entre la Plaza de Murillo y la Puerta del Rey del Botánico.
Varias actuaciones arquitectónicas paralelas
La restauración, recuperación y conservación del cerramiento conlleva varias actuaciones arquitectónicas paralelas. Por un lado, la retirada, para su limpieza y restauración, de la verja de hierro dulce que en su día fue forjada en Tolosa (Guipúzcoa); por otro, recuperar la bancada de granito que en parte se encuentra soterrada bajo ajardinamientos y pavimentos por pasadas intervenciones urbanísticas en el Paseo del Prado.