Un grupo de aproximadamente cien individuos enmascarados y equipados con martillos, bates y porras extensibles tendió una emboscada criminal contra dos autobuses que trasladaban a aficionados del Rayo Vallecano por una autopista de Polonia. El ataque, ocurrido esta madrugada previo al partido contra el Jagiellonia, resultó en diez personas heridas, nueve de ellas españolas, y obligó al traslado de tres de los afectados a hospitales locales.
Los autocares fueron interceptados en la carretera S8, cerca de Ostrów Mazowiecka (a unos 90 kilómetros de Varsovia), alrededor de la una de la madrugada. La agresión se desató en un tramo solitario cuando dos vehículos civiles cerraron el paso a los autobuses, obligándolos a detenerse. Acto seguido, los encapuchados irrumpieron desde un sector boscoso colindante, rodeando los vehículos y tratando de acceder a la cabina y al interior.
Violencia premeditada y siete detenciones
La reyerta se libró en el interior de los autocares, donde los hinchas madrileños improvisaron bloqueos en las puertas y pasillos para contener la entrada de los asaltantes. La policía polaca confirmó que, además de los nueve españoles, un ciudadano polaco también fue herido. El resto de los lesionados recibió asistencia médica in situ antes de ser interrogados.
Los investigadores apuntan a que la emboscada fue meticulosamente preparada. En los vehículos utilizados para forzar la detención, se incautaron cizallas para cortar vallas metálicas, lo que indica que el grupo principal había preparado el acceso desde el bosque.
Las autoridades lograron que una patrulla policial llegase a la zona «pocos minutos después» de iniciarse la acción. En las horas subsiguientes, se llevaron a cabo siete arrestos en la región de Biaystok, donde se celebra este jueves el partido entre Jagiellonia y Rayo Vallecano de la Conference League, a las 18:45 horas en horario español.
Entre el material incautado por la policía se encontraron pasamontañas, porras, palos de madera y distintivos y merchandising del equipo local, Jagiellonia Biaystok. Los medios locales sostienen que los agresores están vinculados al club y son conocidos peyorativamente como pseudokibice (pseudohinchas).
Tras más de una hora detenidos, los autocares continuaron su viaje escoltados por la policía. La investigación continúa abierta, y no se descartan nuevos arrestos a medida que se analicen las cámaras de tráfico y los dispositivos electrónicos intervenidos.
Batalla campal entre ultras en Puente de Vallecas
No se trata del primer encuentro violento entre hinchas vallecanos y polacos. La ciudad de Madrid vivió el pasado jueves, 6 de noviembre, una noche de máxima tensión como preámbulo al partido de la UEFA Conference League que enfrentaba al Rayo Vallecano y al equipo polaco Lech Poznan. Los enfrentamientos entre aficionados radicales en el distrito de Puente de Vallecas escalaron hasta el punto de obligar a la Policía Nacional a una intervención contundente y a provocar el corte del transporte público.
El encuentro, catalogado previamente como de Alto Riesgo por la Comisión Antiviolencia, registró su punto álgido de violencia la noche de ese miércoles. Ultras del Rayo Vallecano, conocidos como ‘Bukaneros’, y seguidores del equipo polaco protagonizaron una batalla campal en las calles del barrio.
Decenas de radicales se enfrentaron, encendiendo bengalas y dejando un rastro de cristales rotos y algún incendio de pequeño tamaño. La situación se descontroló hasta que la Policía Nacional se vio forzada a realizar disparos al aire para dispersar a los grupos. Los altercados se saldaron con un herido leve trasladado al hospital y una persona de nacionalidad española detenida.
Metro afectado y vandalismo previo
Los disturbios tuvieron un impacto directo en la movilidad urbana. El servicio de la Línea 1 del Metro de Madrid quedó parcialmente interrumpido en ambos sentidos durante la madrugada de ese jueves, concretamente entre las estaciones de Puente de Vallecas y Portazgo, debido a la pelea multitudinaria que se desarrollaba en la superficie.
Estos incidentes se sumaron a otros problemas de orden público registrados previamente, como la intrusión de un ultra del Lech Poznan en el Estadio de Vallecas en la madrugada anterior, donde realizó grafitis y colocó pegatinas.
